Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Daverunner:
9
Drama. Thriller Unos delincuentes de poca monta deciden atracar la sucursal de un banco de Brooklyn. Sin embargo, debido a su inexperiencia, el robo, que había sido planeado para ser ejecutado en apenas diez minutos, se convierte en una trampa para los atracadores y en un espectáculo para la televisión en directo. (FILMAFFINITY)
5 de julio de 2020
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tarde de perros es un espectáculo cinematográfico de principio a fin. Con dos de los mejores actores de la historia en los papeles principales y con un director en estado de gracia -probablemente firmando sus mejores títulos en la década de los 70 salvo algunas excepciones- la película es una mezcla de thriller, drama social y comedia.

La película es un thriller en toda regla. El suspense y la tensión desde el inicio del atraco reflejado tanto en los atracadores como en los rehenes se traslada al espectador, al que consiguen traspasar esa carga emocional. De esta manera y a pesar de representar a unos delincuentes es difícil no empatizar con esos dos pobres diablos. Lo mismo les ocurre a sus rehenes, que sufren el síndrome de Estocolmo durante las horas en las que permanecen encerrados en el banco.

La denuncia social de la obra se puede ver reflejada en los derechos de los homosexuales. El atraco fue verídico y lo que John S. Wojtowicz -el asaltante real- quería era reunir dinero para la operación de cambio de sexo de su amante. Esto aparece en el filme en el que Sonny es un hombre casado y con dos hijos que a su vez tiene un amante homosexual. Asimismo, ambos delincuentes son veteranos de la Guerra de Vietnam y al igual que en tantas otras películas, se evidencia la dificultad que tuvieron los combatientes en dicha contienda para encontrar su sitio en la sociedad una vez regresados del frente.

A pesar de toda esta carga emocional y social, la película tiene sus momentos cómicos. Las peleas dialécticas que tiene Sonny con alguna de las cajeras, el histrionismo de su personaje y el de Sal así como la inexperiencia de ambos como delincuentes -lo que da lugar a situaciones ridículas- sirven de contrapunto y equilibrio en la trama.

La mezcla de estos dos personajes, interpretados brillantemente por Pacino y Cazale, con un director de la talla de Lumet y un guión galardonado con el Oscar de Frank Pierson -responsable del libreto de La leyenda del indomable- dan lugar a una obra maestra, una película redonda que engloba los rasgos principales del thriller estadounidense de los 70.

Películas con un enfoque de la violencia como no se había visto anteriormente y que reflejaban la situación de lugares como Nueva York o Los Ángeles. Grandes ciudades en cuyos barrios la agresividad, delincuencia y perversión germinaban a pasos agigantados. La realidad de una sociedad post Vietnam y pre Watergate convulsa e irritada.

Más datos sobre esta y otras películas en argoderse.com
Y en Facebook en la página argodersecine
Daverunner
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow