Película que se escuda en uno de los personajes de historieta y TV, con el que muchos crecimos y nos divertimos; aparentemente una película con todos los elementos de una cinta de acción, pero con un mensaje peligrosísimo; incitadora de violencia, generadora de ideas al terrorismo, destructora de la moral y deprimente, dejándonos la sensación que todo el mundo es malo, corrupto y que somos como corderos que van al matadero.
Increíble como Christopher Nolan después de dirigir una obra maestra como "Memento" se preste para este tipo de cosas -el vil metal me imagino- y a Heath Ledger prefiero recordarlo en otras de sus películas, aquí se veía muy enfermo mentalmente, para lo cual los productores de la cinta parece que les importaba muy poco.
Ganadores, muchos, los productores y dueños de la cinta y sus cuentas bancarias, el costo, una sociedad infundida de miedo y los padres sin que reprocharles a sus hijos nada después de ver esto. Realmente ofende este tipo de juego con la moral humana.

En conclusión: en nuestra época hasta los héroes de historieta deben ser malos.