Vale la pena esta nueva película bien interpretada por Jennifer Lawrence y sobre la cual gira la trama encarnando a una joven que es reclutada por el ejercito ruso para mediante su sensualidad pueda convertirse en espía y obtener datos que serán de suma importancia para el gobierno. Con desgano y solo para ayudar a su madre enferma es que decide convertirse en algo que no quiere y es allí donde conocerá a un espía americano con el cual se verá envuelto en más de un problema. Las actuaciones son convincentes tanto de Joel Edgerton, Jeremy Irons y en un pequeño papel Charlotte Rampling. Como dato importante es conveniente decir que el film mantiene durante toda su duración en suspenso sostenido lo que la hace pasar un rato verdaderamente divertido. Para ver.