El primer objetivo me pareció trepidante y todo un ejemplo de peli de acción.

Este segundo objetivo, aparte del horror de ver a la preciosa Londres destrozada, no me ha parecido más que un petardo infumable sin ningún interés. Ni siquiera Morgan Freeman que normalmente es capaz de hacer milagros puede salvar esta segunda entrega totalmente previsible, llena de clichés sin una pizca de imaginación y completamente absurda de principio a fin.

Supongo que el tercer objetivo será Paris y veremos a Butler corriendo por la Plaza Vendôme blandiendo la pistola mientras la pobre torre Eiffel se va a hacer gárgaras... puffff.