No hay mucho que decir de esta peliculita que seguramente caerá en el olvido en cuanto cese su impresionante promoción.

Y que conste que no digo que no esté entretenida y bien hecha, que lo está, pero le falta quizá una pincelada de verosimilitud y contemporaneidad porque, al situarse en el pasado y mezclar un mundo de fantasía con otro que, aun siendo real queda muy atrás en el tiempo (la primera guerra mundial), todo tiene un tono onírico y demasiado chocante a veces, sobre todo cuando vemos a la amazona con su impoluta armadura, perfecto peinado y dientes como perlas en un campo de batalla cubierto de ceniza entre soldados harapientos. Es simplemente chirriante... raro.

La película tiene algunos altibajos de ritmo y sobre todo la primera parte, que se desarrolla en el mundo de las amazonas, es demasiado larga y se hace tediosa por la incomprensible calidad de los doblajes. No sé si es que a las amazonas les han querido dar un acento especial o qué, pero suenan como alemanas que acaban de aprender castellano.

Chris Pine y Gal Gadot están correctos en sus papeles, y hay partes del guión que te roban alguna sonrisilla. Efectos visuales buenos, excepto en la primera parte en la isla, que tampoco son para tirar cohetes, y un final con acción y explosiones que a todos gustará.

No hay una gran historia, ni un gran personaje, ni nada que se grabe en la memoria por su originalidad. No creo que Wonder Woman tenga mucha continuidad en el cine si los de DC no mejoran mucho este comienzo que deja tan poquitas buenas sensaciones al salir de la sala.