Al ver la película, da la sensación que tanto Manuel Alexandre y José Luis López Vázquez están un escalón por encima. Gracias a ellos se puede apreciar cierta simpatía y agrado por esta película pero haciendo algún que otro esfuerzo.
Al terminar de verla, no sé porqué, probablemente porque se asemejan mucho, me vino a la cabeza "El hijo de la novia" de Juan José Campanella, y no tienen nada que ver la una con la otra, hay una difernecia abismal.
Si desean ver eso que están buscando (o no) en esta película española, mejor vayan a la argentina.