Una obra maestra, sin duda; de las mejores de ciencia ficción que he visto
. La catarsis del personaje principal es evidente: Solaris le ha dado una segunda oportunidad para despedirse de su esposa, y esta vez, aunque también acaba perdiéndola, ve las cosas de otra forma. Solaris es como un gran psicólogo capaz de materializar los traumas y hacer que nos enfrentemos a ellos. Y quizá no solo los traumas, sino que hace ver qué es lo que valora cada persona más en su vida. Y siempre es a otra persona. ("Al ser humano, le hace falta otro ser humano") Nuestra curiosidad es insaciable, exploramos el cosmos, y la propia Tierra, pero al final lo que buscamos realmente son conexiones.
Se echan de menos quizá más explicaciones sobre las materializaciones de los otros personajes presentes en la nave, pero está bien no desviarse de la trama principal. El final es totalmente inesperado y desconcertante. ¿realmente está la dacha en Solaris? ¿Qué hemos estado viendo todo este tiempo?
El tratamiento del agua como elemento conductor de todos los hechos es increíble. La lluvia, el río, el océano...incluso el agua penetrando en la casa al final.. muy simbólico. Dicen que el agua representa los sentimientos, aquí está claro que si.