La cinta sin ser mala muestra un argumento muy predecible y explotado. Con algunas novedades que no están nada mal la trama mantiene entretenido al espectador hasta el final. Las actuaciones no son demasiado buenas a excepción de la del carismático y divertido Will Smith. Como ya he dicho a lo primero, el filme presenta una historia sobreexplotada con el típico debate sobre la automatización de las máquinas, más concretamente de los robots. Lo mismo de siempre, que desde que se realizó la original de Terminator no han parado de reutilizarlo hasta la saciedad. Los robots están bien diseñados, pese a que la mayoría de estos son iguales. Poco más se puede destacar de esta filmación. Nadie puede decir que no sea entretenida porque si algo tiene es entretenimiento durante sus casi 2 horas de metraje, pero tampoco se puede decir que sea algo más que un film entretenido. Pelis como esta hay muchísimas.