El problema de "The Blind Side" es que tanto premio invita a creer que se trata de una buena película; no hay que equivocarse, no es más que otra americanada sensiblera que, si bien entretiene, no aporta gran cosa.
La historia es mínimamente original (una familia blanca adinerada adopta a un chico negro y le ayuda a triunfar en el fútbol) y, si bien es una crítica al sistema, no resulta muy creíble teniendo en cuenta que todo es constante felicidad, resolviéndose los problemas sin las menores dificultades (por ejemplo, el personaje de Bullock probablemente no saldría tan bien parado tras enfrentarse a un grupo de afroamericanos de los barrios bajos).
Si bien Sandra Bullock realiza un buen papel, no está tan diferente de cómo la vemos en sus típicas comedias: muestra que es una buena actriz, pero tanto premio (Oscar, Globo de oro, Sindicato de actores...) es algo exagerado. Quizá se deba a la falta de competencia porque su agradable papel no tendría nada que hacer contra el de pasadas premiadas (Kate Winslet en "The reader", Charlize Theron en "Monster"...). El resto del reparto está correcto, pero también típico; quizá el joven Jae Head sea el más destacable.
Lo realmente sorprendente de "The Blind Side" es que consiguiera ser nominada al Oscar a mejor película. Si bien se trata de un rebote por la suerte de que este año fueran 10 los films nominados, muchas películas lo merecerían antes. Sin duda su disfraz de drama la ha situado por delante de películas de mayor calidad tales como "500 días juntos".
Pese a todo, se trata de un film agradable que combina chistes y sensiblerías al más puro modo americano: para disfrutar, pero no para premiar.