Original y siempre sorprendente Medem en este hipnótico relato sobre las reencarnaciones.
No me a decepcionado en absoluto, la considero una obra de arte, ademas de por las obras mostradas por Ana, por esos maravillosos planos que mas parecen un cuadro mágico (El de Ana y su padre junto a la "Mecenas" con la luna al fondo me dejó impresionado)
Manuela y Bebe están deliciosas y se agradece ver a un siempre rotundo Lluis Homar.
La historia te atrapa desde el primer capitulo, que curiosamente es una cuenta atrás de 10, mas un prologo interesante y un epílogo absolutamente hilarante y contundente donde Ana deja atrás su inocencia para convertirse en vengadora y donde Manuela está en su piel.
Si no te gusta el "Universo Medem" pasa de verla porque te volverás loco y todo te parecerá un despropósito, si desde "Lucia y el sexo" tienes mono de Medem te saciará todas tu espectativas.