Quien suscribe esto es enemigo genético de series propias o extranjeras. Es aburrido observar como una idea, un guión, unos personajes, se alargan como el chicle durante capítulos y capítulos dando mil vueltas a la historia, buscando una audiencia comprometida y casada con sus propuestas.
Pero Kyle XY me enganchó desde el primer capitulo. Su estética de frescura y de inocencia joven se funde con la idea del personaje con superpoderes que todo el mundo llega a apreciar por su humanidad y por su capacidad para superar los problemas que ha heredado con su complicado origen.
Una banda sonora cuidada y acorde a su estética y personajes, redondea el interés de la serie.
Es cierto que puede resultar light, desnatada y hasta cursi para muchos paladares, pero tambien lo es su capacidad de transmitir la identificación con esos seres que son plenamente humanos que viven con un superhumano que solo consigue hacerles la vida más complicada. Pero es que es imposible no querer a Kyle xy...