Haz click aquí para copiar la URL
Voto de David Mudarra:
6
Drama Tras su divorcio, la escritora Mavis Gary (Charlize Theron) atraviesa una crisis existencial que intenta superar volviendo a su pueblo natal. Su situación empeora cuando intenta volver con su novio del instituto (Patrick Wilson), que ya está casado y es padre de un niño. Pero Mavis encuentra un inesperado aliado en otro compañero del instituto (Patton Oswalt). (FILMAFFINITY)
21 de mayo de 2013
Sé el primero en valorar esta crítica
Diablo Cody se cree una listilla. Desde su primer proyecto, la insoportable “Juno”, la guionista más cool de la historia del cine, ha intentado dejar claro que sería una mezcla perfecta entre John Hughes y Quentin Tarantino. Nada más lejos de la realidad. “Juno” es una de las pelis más sobrevaloradas que recuerdo y “Jennifer´s Body” tenía momentos y era divertida pero quedaba lejos de ser una gran comedia de terror. Pues bien, su nuevo guión me ha cerrado la boca.
Esta es una peli ante todo coherente en su planteamiento abordando un personaje peterpanesco lejos de clichés y lugares comunes. Y lo es en su resolución, valiente y acorde con el desarrollo de la historia. No hay lugar para la redención ni para grandes lecciones vitales. En su lugar encontramos bastante mala leche y bastantes risas, de las de sonrisa congelada, ya que el filme tampoco anda corto de momentos dramáticos (su protagonista es un personaje claramente trastornado).
Encuentro más de un paralelismo entre esta peli y la de “Los descendientes”. Las dos parten de una base sencilla pero compleja a la vez. La radiografía de un adulto que sufre una crisis existencial y decide dar un cambio de rumbo a su vida. Y al mismo tiempo, las dos, adoptan un tono que oscila entre la comicidad y la tragedia, tan humano y poderoso que tanto el realizador Payne como el tandem formado por Reitman-Cody, cada uno con sus particularidades, exhiben con una pasmosa naturalidad. Las dos, al fin y al cabo, tratan de retratar, con humildad y maestría, algo tan atractivo como la imperfección humana.
Esta peli se olvida de esos ecos naive que poseía “Juno”, aunque la ingenuidad en sus diálogos sigue latente. Seguramente, por la edad de su protagonista, éste más cerca de “Up in the air” pero contiene mucha más energía y mala leche. Sin tapujos ni discursos políticamente correctos, excepto esas innecesarias frases en off finales tan edulcoradas como las novelas de la protagonista. Reitman construye la evolución interior de esta antiheroina llena de complejidades y contradicciones, con una madurez y brillantez a la cual no había llegado hasta la fecha. Y es que el motivo por el que llegamos a empatizar con Marvis Gray no solo se debe a la espléndida encarnación de Charlize Theron sino a que todos nosotros poseemos, en mayor o menor grado, algo de ella.
Estamos ante una peli que además de romper con la mayoría de los clichés de las comedias románticas de Hollywood (y en las novelas rosa como las que escribe la protagonista) elabora bajo sus propias pautas una radiografía incómoda, oscura, desternillante y auténticamente cercana sobre la inmadurez en el mundo de los adultos. Que fácil y sencillo parece hablar de este tema... y que difícil hacerlo como aquí se hace.
El excelente guión se complementa a la perfección con la soberbia interpretación de Charlize Theron, que nunca estuvo mejor, perfecta en su papel de treintañera fracasada, alcohólica y dicho en frío, muy mala persona. Debería haber ganado el Oscar por este papel y no por aquel bodrio de “Monster”.
No sorprendo a nadie pero Patton Oswalt es el gran descubrimiento de este filme. Entrañable, divertido y tremendamente triste. Una interpretación que no debería pasar desapercibida. Al lado de estos dos monstruos poco o nada puede hacer Patrick Wilson, aunque su acento paleto resulte de lo más divertido.
David Mudarra
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow