Despiadado documental de la competitividad capitalista. La película muestra las visitas de unos vendedores de biblias a las casas de potenciales compradores captados previamente en la iglesia del barrio; sus estrategias de venta con los compradores, las conversaciones relajadas entre vendedores al terminar la jornada y las relaciones de poder con sus superiores ejemplifican a la perfección la voracidad de la renovada máquina capitalista en su modelo neoliberal.

El documental sigue a sus protagonistas sin interactuar con ellos generando momentos naturales, distendidos en sus relaciones privadas y reverentes en las profesional. Rodado en blanco y negro, la producción es austera y sencilla, y las imágenes crudas.

El documental es una perfecta representación de las desgracias capitalista: vendedores que generan necesidades a gente sin apenas recursos, un libro sagrado convertido en objeto de consumo, productos innecesarios, la moral de los compradores más las persuasión de los vendedores para derrotar la resistencia a la compra, competitividad aparentemente sana entre vendedores y despiadada en los engranajes de la empresa pero muy bien disimulada, éxito y fracaso como únicos resultados de sus trabajos, vergüenza al no cumplir las expectativas y compasión del resto de compañeros, las figuras necesarias para sustentar el circo: el controlador, los premios, los consejeros...