¿Cómo no ver Doctor Who? Es la serie británica por antonomasia y Torchwood, su spin-off, es una serie de lo más decente (especialmente en las últimas temporadas).

Así pensaba antes de iniciar mi andadura hasta esta serie. Por desgracia estaba equivocado. Doctor Who es una serie de ciencia ficción abyecta, irrisoria, ridícula y lamentable. Quizá sea algo duro con ella, pero sólo con ver el episodio piloto podrás hacerte una idea de lo rematadamente mala que es.

Un ejemplo: Los daleks. Una especie alienígena similar a R2-D2 de Star Wars que pese a lo patética que es en la serie es mostrada como la cúspide de la peligrosidad, como la mayor amenaza para el universo. Los efectos especiales de Doctor Who son dignos de los años 60 y 70, es más, diría que son inferiores a los de series como Babylon 5.

¿Los guiones? Incoherencias por doquier, absurdos hasta el infinito y con diálogos incomprensibles justificados siempre en la inteligencia suprema del Doctor.

Con esta premisa diréis, ¿tiene algo bueno esta serie? Pues sí, de vez en cuando, les da por hacer un buen episodio como Blink, en la tercera temporada. Un episodio que nos muestra como sería la serie sino abusaran de tanto humor absurdo, de tramas repetitivas e invasiones y amenazas universales penosas.

¿A quién recomiendo la serie? A todo aquél que no le guste la ciencia ficción seria, oscura, adulta, inteligente y con guiones como los que puedan tener series como Battlestar Galactica o Children of earth (tercera temporada de Torchwood).

Si te gustan las series en que puede suceder cualquier cosa, muy muy muy freaks, con especies alienígenas que dan verguenza ajena, con un sentido del humor absurdo y con cambios constantes de protagonistas principales debido a exigencias del guión... entonces ésta es tu serie.

Y bueno, os dejo con los Daleks, la especie más peligrosa y ocurrente del universo conocido:

!!Exterminad , exterminad, exterminad!!