Entretenida adaptación esta vez interpretada por Will Smith como Robert Neville. Siento decir que cuando este hombre hace comedia solo funciona a veces, y qu, cuando hace drama, no funciona nunca. Menos mal que los efectos especiales son excelentes y en la primera parte dominan la película y así podemos obviar las carencias interpretativas de Smith.

La segunda parte se torna más clara en torno a la tensión y a la tensión acumulada en la primera parte. El sentimentalismo aflora y el guión se tambalea, y con él los actores. Los diálogos tienden a ser más políticamente correctos y la acción queda en un medio-segundo plano para dar paso a las explicaciones.

Aún así no está mal. La ambientación está muy bien, los efectos especiales también. Los momentos terroríficos están bien conseguidos y a pesar de tener un par de fallos, el guión deja bien claro cual es su intención: entretener. Lo que no me queda claro es la actuación de Smith. Se rumoreó que su interpretación sería nominada al Oscar ya que él era el peso de la película y tal, tal. Yo creo que las dos nominaciones que recibió en el pasado (Alí, 2001 y En busca de la felicidad, 2006) no se las merecía ya que no es un buen actor. Aún así no desentona mucho con el físico del personaje de Neville. Valoración: 5.8