Más larga que un día sin pan, así se me ha hecho esta historia de cine futurista, catastrofista, fantástico, de ciencia ficción, terror y zombis, casi na.

El gran problema de este tipo de cine y de algún otro, como el de terror, es la poca credibilidad que tienen los acontecimientos que anteceden a la trama, y la también poca verosimilitud de algunas de las soluciones o hábitos adquiridos. Pero con lo primero hay que tragar, de lo contrario no se debe visionar la peli, pero con lo segundo me cuesta mucho más.

Este tipo, inmune al virus, come de todo 3 años después de que la humanidad se viniera abajo tal y como la conocemos. Tiene energía suficiente para ver la tele, iluminar su casa, etc. Cuando hemos de suponer que los alimentos caducan y las centrales energéticas, abandonadas, no son capaces de generar energía, incluso un generador necesita combustible o energía, y de eso no se nos hace ver nada.

Unido esto al esfuerzo que he tenido que hacer para no caer presa de morfeo, no me parece que se merezca mucha más atención, le doy un 6 porque este tipo de cine me mola y lo celebro de esta manera, pero es para menos nota.