Honestamente, me encantó, y me encantó porque es una película honesta consigo misma, muy bonita de ver, muy bien narrada a través de los ojos de un niño, las actuaciones más de lo mismo, te hace empatizar desde el primer minuto, con toques de auténtica brillantez, como el uso del color (la peli es en blanco y negro) en momentos puntuales, sobre todo la fotografía y la composición, sin olvidarme de la magnífica dirección, sin duda, una historia a recordar.

· Cosas buenas: la dirección y la fotografía es de maestría, la historia me encanta, y el casting acompaña súper bien. Tiene ideas cinematográficas sublimes, como el uso de color el momentos clave, la banda sonora más de lo mismo, los diálogos son muy buenos, es emotiva y rebosa un amor al cine y al teatro muy chulo.
· Cosas malas: al estar narrada por los ojos de un niño, hay momentos de demasiada idealización que puedes llegar a no creerte o que parezcan falsos, nada muy relevante.
· Conclusión: es una película muy honesta y humana, muy bien contada, y para mí, la candidata principal al Óscar.