También remarcar las pesadillas, que, aunque para mi opinión quitan algo de ritmo a la película, están muy bien ordenadas y hechas. El final, bueno, los últimos quince minutos son maravillosos. Nunca te dicen si de verdad ha pasado lo que se temían o simplemente era algo imaginado por todo lo que puedes llegar a pensar. La película, además te da a entender que nunca antes ha habido alguien más que fuera desconocido, y por lo tanto sus convicciones de que esa familia para ellos es "mala" hasta que se demuestre lo contrario, y el sumo cuidado que tienen al hacer todo lo que hacen por mucho que se les haya mostrado confianza desde el primer momento, me lleva a pensar en lo que pensamos de nosotros, y si de verdad pasara algo parecido, si pasaríamos a la radicalización de: estos seguro que miran por si mismos y nos matan a la primera de cambio, o si por el contrario nos aferramos a la visión de Travis de darle una oportunidad hasta que pase algo.
Por último agradecer que la pandemia sea una enfermedad y no lo común. Como te dice cuando se conocen los dos padres de familia, no saben qué ha pasado, simplemente cuando empezó a pasar se fueron a un lugar apartado para evitar el contagio y ya está. No quieren saber nada hasta que lo necesiten. Y eso me abre el punto de que lo que están haciendo es vivir hasta que puedan. Se supone que tienen recursos limitados, osea que algún día dejará de estar el agua y el alimento. Eso es bastante realista y es algo que he agradecido al verla.