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Voto de EddieVedder:
6
6,3
48.840
Fantástico. Aventuras. Acción
Después de haber recuperado el reino del Dragón Smaug en la montaña, la Compañía ha desencadenado, sin querer, una potencia maligna. Un Smaug enfurecido vuela hacia la Ciudad del Lago para acabar con cualquier resto de vida. Obsesionado con las enormes riquezas en su poder, el rey enano Thorin se vuelve codicioso, mientras Bilbo intenta hacerle entrar en razón haciendo algo desesperado y peligroso. Pero hay aún mayores peligros por ... [+]
20 de diciembre de 2014
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Señor Jackson, usted me ha decepcionado. No se equivoque, le sigo teniendo en un pedestal por aquellas tres obras magnas y sobresalientes que hizo hace más de una década. El Señor de los Anillos fue una trilogía irrepetible; épica, trepidante, emotiva, espectacular...Fue algo hecho con mucho mimo, con mucho esmero y esfuerzo. La devoción que usted puso en esas tres películas fue de admirar, y casi cualquier fan de los libros estará de acuerdo con esto.
Pero El Hobbit...Ay amigo Peter. No le voy a engañar. Mis expectativas con esta trilogía eran bajas, pero me esperaba más, mucho más del creador de las, seguramente, 3 mejores películas de aventuras épicas/fantásticas jamás rodadas.
Para empezar, hacer una trilogía de un libro de apenas 300 páginas...ya me empezó a oler a chamusquina. ¿No será esto un sacacuartos, no?
Es verdad que meter historias de otros libros y relatos de Tolkien le podía dar un poco más de vida a la historia, hasta ahí de acuerdo, pero no creo que nada de eso justifique hacer 3 películas.
Aún así, esto no es lo peor. Lo peor de todo es que usted, señor Jackson, ha sido vilmente seducido por las secuencias hechas por ordenador. La saga, sobre todo según ha ido avanzando, se ha ido llenando cada vez más y más de escenas inverosímiles, de piruetas y fuegos artificiales que no aportaban nada a la historia y que encima...se notan un huevo.
La primera película no me disgustó. De hecho, creo que es la mejor de las 3. Como he leído por algún sitio, es la que más esencia de El Hobbit tiene de las 3. El humor está bien metido, comienza la aventura, los personajes están bien definidos, empiezan a tomar forma...Todo correcto. Aún así, no llega a la altura de ninguna de la trilogía del anillo.
En la segunda ya se empiezan a meter cosas que no vienen a cuento. Se empieza a abusar de las escenas hechas por ordenador, aparece Tauriel (ninguna pega en ver en pantalla a Evangeline) y Légolas que nada pintan en la historia del Hobbit....Lo único realmente salvable de la segunda película es la ciudad-lago y sobre todo, un impresionante y bien logrado Smaug y la escena con Bilbo.
La tercera tiene sus momentos. No voy a negarlo, si no en vez de un 6 tendría un 4, pero hay muchas sombras entre las luces.
De nuevo, el abuso de las secuencias por ordenador han sido más que evidente. Escenas sonrojantes, fantasmadas por doquier....Señor Jackson, más que contar una historia usted se ha dedicado a que el Hobbit fuera lo más impresionante posible, lo más grandioso, lo nunca visto visualmente. Con estos delirios de grandeza se ha cargado usted una historia que podía dar para mucho y encima ha metido (perdón, inventado) historias que nada tenían que ver con esta. Escenas como las de Légolas (la palma de oro se la lleva..........."Tío saltando por piedras que se están cayendo al vacío para no caerse él") o el momento carromato con Bardo....Todo esto me parecía que estaba ahí para satisfacer a la gente menos exigente, a la gente que solo ha ido a ver el hobbit por entretenerse, para ver escenas imposibles y espectaculares a tutiplen, pero que la historia se la traía al pairo. Pero esta no es la esencia de El Hobbit, no es la esencia de La Tierra Media.
Por supuesto, en ESDLA también hay fantasmadas, pero están contadas con los dedos de una mano y no son tan cantosas y la mayoría de los efectos especiales no solo no se notan que son tal si no que encima, están más que justificados.
El humor....mejor habérselo guardado. El humor ha recaído en un personaje patético con chistes para niños. Una especie de lengua de serpiente convertido...¡qué digo convertido! ¡Rebajado a un triste bufón!. Señor Jackson, usted tendría haber entrado en escena en mitad de la película y haberse cargado, pistola en mano, a ese engendro de personaje.
¿Cabras, gorrinos gordos? ¿Por qué no, habrá pensado el bueno de Jackson? Que por cierto, ¿de dónde demonios aparecen las malditas cabras? Ñeeeee....Todo un poco forzado.
La batalla pintaba que iba a ser lo nunca visto...Me quedo, sinceramente, con el Abismo de Helm o con el asalto a Minas Tirith. De largo. No hay nada en la batalla que me suscite la emoción o la épica de las anteriores batallas nombradas. Nada. Tiene sus momentos, obviamente, y en ciertos puntos es impresionante pero...nada más. Y ¿por esto usted ha relegado a los personajes, a la historia, a un discreto segundo plano?
Por no hablar de los primeros diez minutos del film (hablo en Spoiler)*.
La banda sonora de esta trilogía tampoco ha sido destacable. El gran Howard Shore ha compuesto una buena banda sonora, pero que está a años luz de la conseguida en la trilogía del anillo.
Quizá era pedir demasiado. La BSO de ESDLA no deja de ser una obra maestra hecha por un genio.
Sigo en Spoiler pero no es Spoiler (salvo los * del final que sí que son spoilers).
Pero El Hobbit...Ay amigo Peter. No le voy a engañar. Mis expectativas con esta trilogía eran bajas, pero me esperaba más, mucho más del creador de las, seguramente, 3 mejores películas de aventuras épicas/fantásticas jamás rodadas.
Para empezar, hacer una trilogía de un libro de apenas 300 páginas...ya me empezó a oler a chamusquina. ¿No será esto un sacacuartos, no?
Es verdad que meter historias de otros libros y relatos de Tolkien le podía dar un poco más de vida a la historia, hasta ahí de acuerdo, pero no creo que nada de eso justifique hacer 3 películas.
Aún así, esto no es lo peor. Lo peor de todo es que usted, señor Jackson, ha sido vilmente seducido por las secuencias hechas por ordenador. La saga, sobre todo según ha ido avanzando, se ha ido llenando cada vez más y más de escenas inverosímiles, de piruetas y fuegos artificiales que no aportaban nada a la historia y que encima...se notan un huevo.
La primera película no me disgustó. De hecho, creo que es la mejor de las 3. Como he leído por algún sitio, es la que más esencia de El Hobbit tiene de las 3. El humor está bien metido, comienza la aventura, los personajes están bien definidos, empiezan a tomar forma...Todo correcto. Aún así, no llega a la altura de ninguna de la trilogía del anillo.
En la segunda ya se empiezan a meter cosas que no vienen a cuento. Se empieza a abusar de las escenas hechas por ordenador, aparece Tauriel (ninguna pega en ver en pantalla a Evangeline) y Légolas que nada pintan en la historia del Hobbit....Lo único realmente salvable de la segunda película es la ciudad-lago y sobre todo, un impresionante y bien logrado Smaug y la escena con Bilbo.
La tercera tiene sus momentos. No voy a negarlo, si no en vez de un 6 tendría un 4, pero hay muchas sombras entre las luces.
De nuevo, el abuso de las secuencias por ordenador han sido más que evidente. Escenas sonrojantes, fantasmadas por doquier....Señor Jackson, más que contar una historia usted se ha dedicado a que el Hobbit fuera lo más impresionante posible, lo más grandioso, lo nunca visto visualmente. Con estos delirios de grandeza se ha cargado usted una historia que podía dar para mucho y encima ha metido (perdón, inventado) historias que nada tenían que ver con esta. Escenas como las de Légolas (la palma de oro se la lleva..........."Tío saltando por piedras que se están cayendo al vacío para no caerse él") o el momento carromato con Bardo....Todo esto me parecía que estaba ahí para satisfacer a la gente menos exigente, a la gente que solo ha ido a ver el hobbit por entretenerse, para ver escenas imposibles y espectaculares a tutiplen, pero que la historia se la traía al pairo. Pero esta no es la esencia de El Hobbit, no es la esencia de La Tierra Media.
Por supuesto, en ESDLA también hay fantasmadas, pero están contadas con los dedos de una mano y no son tan cantosas y la mayoría de los efectos especiales no solo no se notan que son tal si no que encima, están más que justificados.
El humor....mejor habérselo guardado. El humor ha recaído en un personaje patético con chistes para niños. Una especie de lengua de serpiente convertido...¡qué digo convertido! ¡Rebajado a un triste bufón!. Señor Jackson, usted tendría haber entrado en escena en mitad de la película y haberse cargado, pistola en mano, a ese engendro de personaje.
¿Cabras, gorrinos gordos? ¿Por qué no, habrá pensado el bueno de Jackson? Que por cierto, ¿de dónde demonios aparecen las malditas cabras? Ñeeeee....Todo un poco forzado.
La batalla pintaba que iba a ser lo nunca visto...Me quedo, sinceramente, con el Abismo de Helm o con el asalto a Minas Tirith. De largo. No hay nada en la batalla que me suscite la emoción o la épica de las anteriores batallas nombradas. Nada. Tiene sus momentos, obviamente, y en ciertos puntos es impresionante pero...nada más. Y ¿por esto usted ha relegado a los personajes, a la historia, a un discreto segundo plano?
Por no hablar de los primeros diez minutos del film (hablo en Spoiler)*.
La banda sonora de esta trilogía tampoco ha sido destacable. El gran Howard Shore ha compuesto una buena banda sonora, pero que está a años luz de la conseguida en la trilogía del anillo.
Quizá era pedir demasiado. La BSO de ESDLA no deja de ser una obra maestra hecha por un genio.
Sigo en Spoiler pero no es Spoiler (salvo los * del final que sí que son spoilers).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Pero bueno, no todo es malo en esta película (ni en la trilogía). Martin Freeman ha sido todo un acierto, regalándonos un Bilbo magistral y muy superior al Frodo de ESDLA. Lástima que la película no haya estado a la altura del personaje. Ha habido momentos emotivos, momentos muy buenos. Qué casualidad que en ninguno de ellos había efectos especiales. Qué casualidad que la mayoría de ellos nos los hayan regalado Freeman, McKellen y Armitage. Te podías haber ahorrado historias de amor ridículas, escenas de acción sonrojantes, efectos por ordenador....y haber aprovechado este trío de personajes mucho más (más Smaug...¡qué pena no haber podido oír a Cumberbatch! Dicen que es espectacular).
Las referencias a El Señor de los Anillos han sido una de las cosas que más me han gustado, aunque en esta película tampoco me haya gustado en exceso el enfrentamiento contra los Nueve y Sauron.
Desde luego, lo que más me ha gustado ha sido el final (Spoiler)**.
Para cerrar la extensa crítica, añadir que los de la Warner son unos auténticos sinvergüenzas. No sólo obligan (por lo menos en mi ciudad) durante dos dias, miércoles y jueves, a ver la película casi exclusivamente en 3D (para ganar más pasta). No sólo aumentan en casi un euro el precio de la entrada respecto a otras películas. No, encima prohíben, sí, sí, prohíben que haya ningún tipo de descuento en esta película, ni día del espectador, ni carnets ni hostias. ¡Vaya cara que tenéis!
Señor Jackson, me despido de usted no sin antes recalcar lo decepcionado que estoy con usted.
¿Donde está Smaug? ¿Donde están los enanos? ¿Donde está Bilbo? ¿Donde está la historia? ¿Donde están los personajes?
Todo, absolutamente todo relegado al segundo plano para centrarse en la batalla, que no tiene emoción ninguna, que ni siquiera es espectacular.
Cuando por fin nos devuelven a la historia de los personajes y esperas un épico desenlace....te quedas perplejo viendo como Tauriel y Légolas se llevan todo el protagonismo con una lucha intrascendente y luego despachas la que debería de haber sido la lucha de la pelicula, la de Thorin contra Azog, en unas cuantas escenas. Y luego un gracias y hasta luego. "La batalla terminó. ¡Chicos! Recojamos esto rápido y salgamos de aquí, que se nos quema el cocido". ¿Pero esto qué es señor Jackson? Esto no es El Hobbit. Por no ser, no es ni buena película.
Nota: 5'6.
* ¿En serio? ¿Diez minutos con Smaug y se lo cargan? Señor Jackson, ¿para qué? Para eso habértelo cargado en la dos. Parece mentira que Légolas o Tauriel aparezcan más en pantalla que el carismático dragón.
** Llega Bilbo a casa y pasan los años. Bilbo sentado, ya mayor, mirando mapas y rememorando viejos tiempos y viejos amigos y de repente se oye como alguien llama a la puerta. Escena por todos los amantes de la trilogía del anillo conocida pero vista desde el otro lado. Bilbo no quiere que le molesten más con el cumpleaños, no quiere visitas, está harto...Pero de repente...oye la voz de Gandalf y su rostro se ilumina, aparece una cálida sonrisa en su boca. Sabe que su viejo amigo, al que lleva sin ver muchos años, está allí. Una sonrisa de profunda felicidad. Simplemente maravilloso. Bilbo se levanta raudo y veloz para abrir la puerta y asegurarse que es él. Se oye la conversación que todos conocemos de la película, pero no se centran en ello. Se oye el reencuentro de los dos viejos amigos pero se ve el mapa de la montaña de Smaug. Un final perfecto para un trilogía imperfecta. Porque de esto es de lo que va el Hobbit. De la aventura, del miedo a lo desconocido, de la codicia, de lo que puede hacer la riqueza a una mente brillante, generosa y buena. De la lucha de los enanos por recuperar su reino...De la amistad. Y poco, muy poco se ha visto de esto, sobre todo en esta última entrega, relegando a los personajes a un segundo plano en detrimento de una espectacularidad que nunca ha llegado a ser tal.
Las referencias a El Señor de los Anillos han sido una de las cosas que más me han gustado, aunque en esta película tampoco me haya gustado en exceso el enfrentamiento contra los Nueve y Sauron.
Desde luego, lo que más me ha gustado ha sido el final (Spoiler)**.
Para cerrar la extensa crítica, añadir que los de la Warner son unos auténticos sinvergüenzas. No sólo obligan (por lo menos en mi ciudad) durante dos dias, miércoles y jueves, a ver la película casi exclusivamente en 3D (para ganar más pasta). No sólo aumentan en casi un euro el precio de la entrada respecto a otras películas. No, encima prohíben, sí, sí, prohíben que haya ningún tipo de descuento en esta película, ni día del espectador, ni carnets ni hostias. ¡Vaya cara que tenéis!
Señor Jackson, me despido de usted no sin antes recalcar lo decepcionado que estoy con usted.
¿Donde está Smaug? ¿Donde están los enanos? ¿Donde está Bilbo? ¿Donde está la historia? ¿Donde están los personajes?
Todo, absolutamente todo relegado al segundo plano para centrarse en la batalla, que no tiene emoción ninguna, que ni siquiera es espectacular.
Cuando por fin nos devuelven a la historia de los personajes y esperas un épico desenlace....te quedas perplejo viendo como Tauriel y Légolas se llevan todo el protagonismo con una lucha intrascendente y luego despachas la que debería de haber sido la lucha de la pelicula, la de Thorin contra Azog, en unas cuantas escenas. Y luego un gracias y hasta luego. "La batalla terminó. ¡Chicos! Recojamos esto rápido y salgamos de aquí, que se nos quema el cocido". ¿Pero esto qué es señor Jackson? Esto no es El Hobbit. Por no ser, no es ni buena película.
Nota: 5'6.
* ¿En serio? ¿Diez minutos con Smaug y se lo cargan? Señor Jackson, ¿para qué? Para eso habértelo cargado en la dos. Parece mentira que Légolas o Tauriel aparezcan más en pantalla que el carismático dragón.
** Llega Bilbo a casa y pasan los años. Bilbo sentado, ya mayor, mirando mapas y rememorando viejos tiempos y viejos amigos y de repente se oye como alguien llama a la puerta. Escena por todos los amantes de la trilogía del anillo conocida pero vista desde el otro lado. Bilbo no quiere que le molesten más con el cumpleaños, no quiere visitas, está harto...Pero de repente...oye la voz de Gandalf y su rostro se ilumina, aparece una cálida sonrisa en su boca. Sabe que su viejo amigo, al que lleva sin ver muchos años, está allí. Una sonrisa de profunda felicidad. Simplemente maravilloso. Bilbo se levanta raudo y veloz para abrir la puerta y asegurarse que es él. Se oye la conversación que todos conocemos de la película, pero no se centran en ello. Se oye el reencuentro de los dos viejos amigos pero se ve el mapa de la montaña de Smaug. Un final perfecto para un trilogía imperfecta. Porque de esto es de lo que va el Hobbit. De la aventura, del miedo a lo desconocido, de la codicia, de lo que puede hacer la riqueza a una mente brillante, generosa y buena. De la lucha de los enanos por recuperar su reino...De la amistad. Y poco, muy poco se ha visto de esto, sobre todo en esta última entrega, relegando a los personajes a un segundo plano en detrimento de una espectacularidad que nunca ha llegado a ser tal.