Por lo que se comentaba en las críticas, esperaba la típica ida de pinza de acción que de vez en cuando llega de las antípodas. Qué grata sorpresa descubrir que su directora, Rosseane Liang, nos ha regalado un homenaje al Giallo de luz verde, luz roja y lluvia entre sintetizadores. Quién no sepa de qué hablo, que ponga el inicio de "Suspiria" la buena, la del 77, y lo compare con la escena de Moretz en el aeródromo.

Para ver que en esta película hay mucho cine, solo es menester ver ese plano de escorzo de la protagonista ante ese avión que se nos presenta como casa del terror. Porque en esta película hay mucho gusto por el cine, trufando su metraje de fotogramas realmente bonitos. La película deja claro lo dicho: Puro Giallo por momentos, con la escena de uno de los soldados muertos, entre luces de colores y litros de sangre... con nuestra protagonista con mueca horrorizadisima mientras lo contempla.

Por supuesto su otro referente es "Alien". Sobre todo la injustamente maltratada "Covenant", también rodada en Nueva Zelanda.

Y para los misóginos enfermizos que atacan el feminismo de la cinta, un consejo: nunca veáis "Ángel de vengaza" de Abel Ferrara. Os va a estallar la cabeza. Literalmente. Yo desde luego, firmaría que nos lleguen más pelis como esta. Muy disfrutable y altamente recomendable.