Me ha encantado. Cuando leí la sinopsis el argumento no me apetecía mucho, pero si se hace algo bueno cualquier espectador lo puede ver con agrado.
Los personajes son creíbles, llenos de matices y la mayoría ni buenos ni malos, como en la realidad. Tiene frases muy buenas, algunas te hacen reir pero sobre todo las imágenes te transmiten muchísimo. Es más lo que ves que lo que oyes. Toda la película te hace pensar, imaginar qué es lo que ocurrirá aunque no se vea, qué van a sentir los distintos personajes, por qué hacen determinadas cosas.
Los actores están magníficos.
Es una película que no se puede clasificar como comedia o como drama, tiene de todo y en general me pareció un reflejo de una realidad que se puede dar en cualquier lugar, no solo en América. No es sensiblera, ni amarga.