Interesante, la primera película de Shrek, nos sorprendió, la segunda nos cautivó, pero no tanto como su antecesora y ahora traen una tercera y nos decepcionan enormemente, al ver una película totalmente fuera de lugar. Parece que Shrek, Fiona, Asno y El gato con botas se han jubilado del cine y nos han dejado a unos personajes ridículos y predecibles que con sus habladurías infantiles solo han conseguido la negación del público. Asno, ahora es solo un burro parlante sin gracia, Fiona es una princesa que ya no aporta nada en el filme, El gato con botas solo es un gato con botas y el propio Shrek es tan solo un prototipo animado que ya no nos hace reír. El resto de personajes también son una vergüenza. Parece que lo único que vale la pena de ver Shrek 3 es que se trata de Shrek. Pero tantas secuelas, cambios y distorsiones han hecho borrosa la imagen de una película encantadora que ya no es nada más que una película. El guión es tan solo un par de frases mal escritas, que parecen estar hechas por un niño de 4 años y el argumento es pésimo. La saga Shrek ha sido exprimida, estrujada, mal ajustada y desgastada. Estimados lectores os recomiendo más, ver la Teletienda que ver un artificio cinematográfico como Shrek 3 y si de todos modos queréis ver esta película, os aseguro que divertirá más observar su caratula. Realmente le puse un 5 porque los créditos parecen más entretenidos que la película.