Puede que porque siempre he sido más de DC que de Marvel, pero esperaba menos de "Aquaman" (superhéroe ridiculizado donde los haya, ved "Padre de Familia") y me ha resultado espectacular y bastante entretenida, pese a algunos excesos (sin llegar a saturar en plan Vengadores) y algunas lagunas de guión.

Entre los puntos positivos, el bestiajo de Momoa, realmente cómodo en el papel. Resulta magnético y es uno de los puntales de la peli, como Amber Heard, maravillosamente arrebatadora. Mencionar los toques de humor, a justas píldoras y sin aburrir como con el maldito Tony Stark, y las escenas épicas, con un buen CGI y una notable bso de Rupert Gregson-Williams, hermano de Harry, más la belleza de las imágenes marinas. Luego, el atrayente tono kitsch, entre comiquero y mitológico, con unos atlantes que a veces parecen Caballeros del Zodíaco y otras sacados de las leyendas de la Antigüedad.

Mención especial para los veteranos Willem Dafoe, Dolph Lundgren y Nicole Kidman.