Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Una_de_ellos:
9
Drama. Fantástico George Bailey (James Stewart) es un honrado y modesto ciudadano que dirige y mantiene a flote un pequeño banco familiar, a pesar de los intentos de un poderoso banquero por arruinarlo. El día de Nochebuena de 1945, abrumado por la repentina desaparición de una importante suma de dinero, que supondría no solo la quiebra de su banco, sino también un gran escándalo, decide suicidarse, pero cuando está a punto de hacerlo ocurre algo extraordinario. (FILMAFFINITY) [+]
22 de diciembre de 2007
19 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
Y de esta máxima puede dar fe nuestro compañero de vivencias George Baileys, luchador incansable, de extraordinaria perseverancia, afrontando los obstáculos que surgen como la espuma en su difícil y bella vida. George Baileys es la mejor muestra de moralidad y generosidad con la que puedan encontrarse; un hombre capaz de sacrificar su bienestar por el de los demás, de dar incluso lo que no tiene y de no rendirse aun en las situaciones más extremas.

En la inmensidad de las estrellas, los ángeles escuchan ansiosos las plegarias y las oraciones de todos aquellos que se encomiendan a Dios como último recurso, pues de ellos depende que les sean otorgadas alas para ver desde el cielo. Y da la casualidad que uno de ellos, Clarence Oddbody, lleva bastante tiempo esperando la oportunidad. Este es el resumen del argumento de una típica película navideña y entrañable que enternecerá tanto al abuelo que reparte caramelos entre sus nietos como al tío gruñón que sólo sabe fumar puros y repetir "qué mal va el país".

James Stewart hace aquí el papel de su vida, y sin duda será recordado, junto a Donna Reed, por protagonizar uno de los grandes clásicos del siglo XX; clásico porque con el tiempo se revaloriza, porque es una película recomendable para toda la familia y enseña a los más pequeños el valor de lo que se tiene; porque hace llorar y reír y rabiar. Lionel Barrymore está también espléndido como villano y malo de la película, muy habitual en sus papeles y no por ello menos meritorio.

A todos aquellos suicidas en potencia, que cada día encuentran una nueva excusa para acabar con sus vidas: háganse un favor y gasten unas dos horitas para reflexionar sobre la importancia de vuestra existencia, de la repercusión que tienen sobre sus más allegados y los que no lo son tanto. Pues, por muchos altibajos que se les crucen cada día por la calle de su mente, siempre habrá, siempre ha de llegar, un rayito de esperanza que vislumbre una solución a sus pesares y les indique el camino hacia un tiempo mejor.

Después del minúsculo sermón pseudo-católico que han tenido que tragar, me gustaría decirles a todos: ¡FELIZ NAVIDAD!. Y, aunque, como yo, seguro que alguien tendrá una razón para estar triste en estas fechas, seguro que también hay muchas para estar feliz, y la principal de todas es que cada uno de nosotros somos únicos y especiales, que estamos VIVOS.
Una_de_ellos
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow