No nos debería de extrañar para nada su aspecto televisivo, pues esta película es un compendio de sketchs pero en clave de drama. La gracia pasa por tratar de abarcar la mayor cantidad de estereotipos de problemas posible, dándoles un tratamiento superficial y ramplón, al estilo de un serial de sobremesa. Y jode mucho ver a estos intérpretes en un proyecto de claro carácter vitalicio, que a pesar de sus loables intentos de tratar sobrellevar con la mayor dignidad posible un guión tan limitado y ridículo en su supuesto dramatismo improvisado sobre la marcha, no logran amenizar el suplicio que proporciona el visualizado de esta película. Me gustaría poder comentar algo más constructivo pero es que la hora y veinte que he aguantado viendo esto ha sido una completa pérdida de tiempo. Quizás si hubiera una sola historia es bastante probable que la película me hubiera gustado algo más aunque el tono fuera igual de telenovelesco: un actor mínimamente capaz de transmitirme algo aumenta los niveles de empatía, lo cual hace que te muestres más benevolente a la hora de levantar la mano, por otro lado al haber mayor minutaje dedicado a una trama la profundización sería mayor. Pero en este caso la elección de presentar muchas tramas independientes de tantos personajes cuya relación es muy poco relevante resulta un recurso pésimo, el abusivo intercalado resulta horrible y hace que la de por sí floja narración pierda más fuerza aún.