Hay películas muy buenas, muy bien hechas, bien dirigidas, con buenas historias y grandes actuaciones. Luego películas que están bastante bien, que resultan interesantes, divertidas o entretenidas. Luego hay películas que ni fu ni fa, regulares o tirando a malillas. Luego películas malas sin más. Y luego está Dragon Ball Evolution.

Pero más allá de eso, existen películas inclasificables, atípicas, excepcionales. Películas que ni uno mismo sabe por qué le fascinan tanto, por qué no se cansaría nunca de verlas, por qué las juzga con las entrañas y no a través de lógica o la razón.

Para mi Alien el octavo pasajero, es una de esas películas. Esa música del inicio.. cualquiera que sienta escalofríos sólo de escucharla sabrá de qué hablo, para el resto sólo será, como mucho, una buena película más (o tal vez ni eso)..