Cuando la veo me vendo a abajo. En esta historia la mujer mas importante es muy bella y si hay una mas bella sera entonces la mas amada y poderosa. Sepan ustedes que en mi país la mujer codiciada y apreciada no lo es por su rostro. Valores como el masaje de pies, el buen manejo de puchero o el dar calor nocturno al honorable suegro cuando hace visita son lo importante. Blancanieves es mujer incompetente pues nunca la vemos entregada a sus tareas, también irrespetuosa, no camina tres pasos por detrás de su hombre. No vale tampoco como mujer ronin como podemos ver y a buen seguro sus atenciones amatorias dejan que desear. En mi país seria desdeñada. Pero en este mundo triste occidental todos la aman y eso me hace sentir absurda. Ese mensaje ya calo y mi esposo español Jesús desdeña mis atenciones amatorias porque yo no soy guapa, dice que en Montera encuentra mujeres mas agraciadas que hacen grandes cosas por módico precio y además no te siguen todo el tiempo. Por suerte mi amigo Mario siempre quiere sake helado y cariño servicial. Me lo agradece con palmadas en cocorota y me hace sentir bien. Blancanieves, piénsenlo ustedes, no parece sentirse bien nunca. Cuestionen entonces el mensaje de esta película.

Además la película es oscura y siniestra como noche en pozo. No es agradable ni bonita de ver. Yo pude verla sin importantes sobresaltos (apenas bolsa de palomitas en cabeza) gracias a terapia con psicóloga Lucia. Ella me dio por fin permiso para ir con Mario al cine, pero quizá ustedes no estén preparados, mucho cuidado con que ven.