Versión fallida de este Conan de pega. Lo que no se entiende es por qué le han puesto el mismo título que la que se rodó en el año 1982. Con la de títulos que hay para elegir: Conan el Cimmerio, el aventurero, el conquistador, el guerrero, el aniquilador, etc, etc, si es que que poca imaginación tienen algunos guionistas...

Por lo que se ve Marcus Nispel no debe de tener mucha idea de lo que es un bárbaro y menos aún Conan. Dudo que se haya leído algún libro de Robert E. Howard (creador de este titan de titanes) ni haya visto los comics de la espada salvaje de Conan, porque mira que poner a Jason Momoa, que no tiene músculos, ni siquiera le da personalidad al personaje y encima sale huyendo dos veces en la película, cuando ve al primer monstruito que se le pone delante. Es vergonzoso que a esto se le llame Conan.

Arnold Schwarzenegger SI que encarnaba a la perfección lo que podría ser Conan. Dotado de una excepcional forma física, de pocas palabras, con un temperamento frío y determinado, estoy seguro que Robert E. Howard no se imaginaba nunca a su Conan huyendo de una batalla de la forma tan bochornosa como se ve en esta película.

Lo peor de todo es que pensaron que poniendo unos efectos especiales de última generación la película iba a ser todo un éxito, cuando en realidad no hay quien se trague este bodrio.

A ver si se anima el señor Schwarzenegger y hace otra película de Conan. Por su edad, podría encarnar a un rey Cimmerio como sale en los libros y recuperar así la gloria robada por esta infame película totalmente desechable.