Nouvelle vague femenina en estado puro que sigue los pasos de Godard en "Vivir su vida" (localizaciones naturales, diálogos improvisados, bajo presupuesto, relato por breves capítulos que transcurren casi a tiempo real, referencias artísticas y literarias, homenaje al cine mudo, empleo de la voz en off, etc.)
El problema es que poco o nada me interesan la vicisitudes de su antipática y engreída protagonista y su superficialidad aristocrática de diva repelente. Jamás vi tanta superficialidad, liviandad y frivolidad al hablar de la muerte, del cáncer y de la enfermedad. También, irse a pasear y a por lo resultados médicos de los análisis con un desconocido, me parece, como poco, extraño e inverosímil.
La película, además, es aburrida, muy aburrida.
Por destacar algo, la canción principal de la película es magnífica.