Con su estilo visual, una percepción de la tecnología más optimista que de costumbre y una trama que se centra en el desarrollo de una historia de amor, este capítulo evoca irremediablemente recuerdos de ‘San Junipero’. No en vano ambos episodios están dirigidos por la misma persona, pero en esta ocasión el resultado final es muy inferior.

El argumento no se sostiene porque el final no tiene sentido, y no lo tiene porque lo que hace es zanjar un tema diferente al desarrollado. Hasta donde yo comprendo esta historia iba sobre una aventura extramatrimonial en la cual el marido se enamora de su amante y se desenamora de su mujer. No iba sobre sexo extramatrimonial, al menos no sobre eso solamente. Por eso el final es totalmente insatisfactorio, transmitiendo una moraleja de valores muy pobres. En el spoiler lo detallo.

En cuanto al uso de la tecnología, bueno, aporta cierto interés al presentar una forma diferente de relación, pero que tampoco es tan novedosa. El sexo virtual ha sido tratado innumerables veces en la ciencia ficción. Se podría plantear, eso sí, la cuestión de si eso es una relación real, y si cuenta como engaño al cónyuge. Pero lo cierto es que el episodio no se mete en esa cuestión.

Las interpretaciones muy sosas, existe cero química entre los amigos, entre el matrimonio y entre los personajes del videojuego. Lo mismo podían poner muñecos parlantes y no variar el resultado emocional.

Por tanto nos queda una historia floja, la cual si le quitas la capa de ciencia ficción se destapa como una pobre historia de aventura extramatrimonial con un final penoso. Además, ¿alguien se cree que un juego de peleas permita tener relaciones? Puede parecer un detalle intrascendente, pero podrían haber tenido la delicadeza de escoger un juego donde resultase creíble (uno de rol con mundo abierto, por ejemplo). No costaba nada.