Muchos fans mayorcitos se quejan del personaje de Luke, de que se haya convertido en un huraño ermitaño que, en un gesto absolutamente inesperado, lanza el sable láser de su padre al mar. A mí me parece que es justo así como se debe de presentar a Luke (por cierto, me encanta la escena en que chupa la leche de la teta de esa especie de morsa-jirafa). Si no ¿cómo puede resultar creíble su desaparición y su desentendimiento de todo lo que sucede en la galaxia si no es porque no quiere saber nada de la cansina religión Jedi y su maldito lado oscuro?

Se habla de lo innecesario de la parte del casino. Es cierto que no soy fan de ese lado tontorrón de Finn, y que al final no encuentran lo que buscan y son engañados como si fueran dos tonticos mu tontos, pero yo sí veo necesaria esta parte porque la película así nos presenta la lucha de clases, que parece que es por donde van a ir los tiros en la próxima entrega (lo cual celebro).

Me encanta que Rey sea una simple “plebeya” y no provenga de distinguida estirpe Jedi. Uno de los puntos principales de la peli es que la galaxia está llena de gente anónima que tiene el poder de la fuerza. No es terreno exclusivo de la sangre Skywalker. Puedes nacer en un cobertizo lleno de mierda y tus padres venderte por cuatro piezas de chatarra y a la vez ser un gran Jedi.

¡Y no hay una Estrella de la muerte! ¿Es que nadie valora que al fin la premisa de una película de Star Wars no sea destruir otra maldita Estrella de la muerte?