El especialista en cine gore, el correcto Eli Roth se pasa al thriller convencional donde patina y se estrella ya que en este film deja a un lado las particularidades que lo hacen "especial", el uso de casquería y imágenes violentas pasándose al derroche de golpes de efecto, la dirección de actores y el manejo de la tensión donde suspende en cada uno de los apartados.

La película, otra "Home Invasion" remake de una cinta semidesconocida de los años 70 cuenta a priori con alicientes para construir un interesante, morboso y sólido thriller gracias a una premisa argumental interesante y provocativa pero el director desaprovecha este elemento y las escenas eróticas no calientan y el momento de sexo se muestra de manera sutil y descafeinado y eso que contaba con una Ana de Armas que transmite sexualidad por cada poro de su piel.

Los actores resultan anodinos en sus roles en especial un Keanu Reeves sobreactuado y que paso por el rodaje solamente para cobrar el cheque en cambio Lorenza Izzo y Ana de Armas le ponen ganas a sus roles de psicópatas pero suspenden en el intento debido a unos personajes mal dibujados que carecen de profundidad sin razones y motivos aparentes para ser como son.

El thriller sin " casqueria" de Eli Roth entretiene y cuenta con unos actores atractivos pero a los 40 minutos de cinta el argumento se estanca y no da para mas, las escenas de tortura se vuelven aburridas repetitivas e inofensivas, los comportamientos de ciertos personajes rozan el ridículo, el humor negro que a veces aparece en el film no funciona, la tensión o angustia nunca se despierta en el espectador y el giro o sorpresa final resulta
anticlimático,ridículo y fuera de lugar.

Eli Roth vuelve a tus thrillers de visceras, desmembramientos y sangre que era donde medianamente destacabas.
Zapatero a tus zapatos.