Poco documental y mucha propaganda. Tal vez fuera necesario realizar algo así, pero a Buñuel se le va la mano cargando las tintas y más parece que en vez de hacer una crítica a la miseria, lo hiciera a los miserables. Buñuel se ríe de las gentes que encuentra en Las Hurdes, los llama bárbaros símplemente por participar en tradiciones que no son más que eso, tradiciones y que como tales aún se practican hoy. Pero sobre todo manipula la realidad y muestra lo que le da la gana y con muy mala intención. Es cierto que en Extremadura había mucha miseria en aquella época -como en muchas otras regiones de la España de entonces- pero no de ese tipo ni de esa forma. Un documental que es, a mi entender, un auténtico despropósito, carente por completo de amor y respeto hacia la realidad que se pretende mostrar.