A ver señores:

1.- El pueblo radioactivo este se ve que en sus tiempos era toda una ciudad no? Lo digo porque con esa cantidad de maniquíes debían tener 5 Zaras o más, sino no lo entiendo.

2.- Lo dicho, cuando te cae una bomba atómica al lado, las radiaciones no matan a tus hijos o los dejan sin defensas o enfermos; no, no, no. Los convierten en psicópatas inmortales.

3.- Pero lo mejor es que con acercarte a la zona tú también te vuelves inmortal!! Que se lo pregunten a ese Scogg o como se llame: le cortan dos dedos, le pegan patadas, puñetazos, culatazos, le rompen el cráneo contra una piedra... y qué? Nada hombre, es un americano-cucaracha. Irrompible. Si ni siquiera pierde las gafas...

4.- El invento del Mc Giver de explotar el remolque me ha encantado. Hay que ver estos amorfos lo listos y rápidos que son para llevarse el cuerpo de los muertos sin que nadie los vea y lo garrulo que es ese que no los ve salir por la ventana justo delante de él... Se ve que a ese le dio poco la radiación.

5.- Y qué come esa gente? A mí que no me hagan creer que por ese desierto de mala muerte pasa tanta gente como para alimentar a todos esos porque me parto más todavía...

Bueno, podemos seguir casi indefinidamente porque cada escena tiene algo que rajar. Ya se sabe que no es una película realista pero que sea tan carente de lógina no tiene excusa. Una cosa tengo clara; yo no me meto en un camino de esos de la américa profunda ni borracha...