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Voto de Sibila de Delfos:
8
Drama La historia, inspirada en hechos reales, muestra la vida de la familia Gucci durante tres décadas, en las que una sucesión de traiciones, dinero, decadencia, luchas de poder y venganza desencadenaron en el asesinato en 1995 de Maurizio Gucci (Adam Driver) por orden de su mujer, Patrizia Reggiani (Lady Gaga), que llegó a ser conocida como "la viuda negra de Italia".
8 de febrero de 2022
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pobre Ridley Scott.
Dos estrenos en 2021, El último duelo y La casa Gucci, que resulta que son dos de las mejores películas del año... y pasan bastante desapercibidas, una en taquilla y la otra entre la crítica.
Bueno, en el caso de La casa Gucci la reacción ha sido algo polarizada, pero llama mucho la atención como un mismo actor puede estar nominado en los SAG y los Razzie a la vez, o cómo la película está en todas las categorías en según qué certámenes y sin embargo sólo consigue una nominación a los Oscar. Curioso. Da que pensar si no obedecerá a ese absurdo rechazo que genera el director británico en los últimos años, cuando sigue siendo uno de los mejores, y sus dos trabajos de 2021 son prueba clarísima de ello.
Porque si hay algo claro en La casa Gucci es que la narración y la realización son una obra de arte, elegantísimas, que tratan siempre a los espectadores como inteligentes y dispuestos a sumergirse en ese nido de serpientes que es esta familia Gucci que queda así retratada en la película. Una inmersión a ratos difícil, la verdad, porque el retrato de Aldo y sobre todo Paolo cae en demasiadas ocasiones en la caricatura, y porque la película se va hasta las dos horas y media, como casi todas las películas "importantes" y "oscarizables" de la temporada, y así es imposible mantener el ritmo todo el tiempo. Pero quitando esos dos defectos, se trata de una película más que notable, apasionada, inteligente y madura, que retrata con acierto la ambición y el ascenso y la caída que inevitablemente van de la mano de una de las más humanas emociones.
Entre los actores, qué se puede decir a estas alturas de dos monstruos como Jeremy Irons y Al Pacino, dos de esos actores que no tienen miedo a nada y que parecen poder con todo. Adam Driver sigue dando pasos adelante en una carrera inmaculada que se está labrando a base de talento y buenas elecciones (ver cuando se niega a darle otra oportunidad a Patrizia). Jared Leto... pues a ver, está claro que cae en ciertos manierismos y ciertas exageraciones (habituales, por otra parte, en actores de Método, como es el oscarizado intérprete de Dallas Buyers Club), pero su impacto en pantalla es descomunal y, como ya hemos dicho, buena parte de culpa está también en la caricaturización de su Paolo Gucci ya desde el guion. Y respecto a Lady Gaga, queda más que claro que su pelotazo en Ha nacido una estrella no fue flor de un día, y que la diva está lista para llevar la carrera cinematográfica que le de la gana. La intérprete de "Bad romance" llena la pantalla cada vez que aparece, y resulta patética, fría, amenazante, amorosa o cruel según convenga. Ella es el alma de la cinta.
Una de las mejores películas de 2021, aunque no sea perfecta, ni mucho menos, y aunque los premios no se lo hayan terminado de reconocer.

Lo mejor: Lady Gaga, maravillosa a la cabeza de un reparto inmaculado, y la infinita elegancia de Ridley Scott como realizador y como narrador.
Lo peor: Es excesivamente larga, y la caracterización de Aldo y Paolo es quizá demasiado caricaturesco.
Sibila de Delfos
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