Esta cinta supone un paso adelante con respecto a su predecesora. Todos los defectos que podía tener la primera X Men son corregidos aquí. En cierto modo, a esta saga le pasó igual que a la de Harry Potter: en su primera película quedó algo coja por tener que presentar exhaustivamente a muchos personajes y ambientes, y en la segunda se dedica a desarrollar la trama desde el minuto 1. éso es lo que ocurre aquí. Tras la brillante secuencia inicial de la Casa Blanca, Bryan singer y sus guionistas nos cuentan una historia fantástica (dentro de los límites del género, claro... tampoco es Shakespeare) protagonizada por grandes personajes.
Es simplemente una de las tres mejores películas de superhéroes.

Lo mejor: Hugh Jackman, Famke Janssen, Ian McKellen y el guión, que no da tregua al espectador.
Lo peor: El final, falsamente emotivo, y la interpretación de James Marsden, lo peor de la película.