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España España · Valencia
Voto de Bryan:
8
Drama La solitaria Eun-hee, de 14 años, se mueve a través de la vida como un colibrí en busca de un sorbo de dulzura donde quiera que lo encuentre. Privada de la atención de su familia, recorre el vecindario con su mejor amiga e intenta establecer relaciones románticas tanto con chicos como con chicas. (FILMAFFINITY)
25 de junio de 2019
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
La pasada noche Bora Kim nos deleitó presentando su ópera prima 'Beol-sae' AKA 'House of Hummingbird' en la 34ª Edición del CinemaJOVE.

La película nos sitúa en Corea del Sur en 1994, cuando el país estaba atravesando el despegue de su desarrollo económico y tres importantes hechos que marcarían esta época (la Copa Mundial de Fútbol, la muerte del presidente Kim Il-Sung y un tercero que comentaré en la zona de spoilers).

Se nos presenta Eun-hee, una joven de 14 años genialmente interpretada por Park Ji-hu que se encuentra desamparada por la situación familiar que la rodea. Una hermana problemática, unos padres que discuten continuamente y el maltrato constante por parte de su hermano mayor, siendo ella la más pequeña de los tres hermanos.

Esta tensión y rutina negligente que el film nos muestra sin tapujos -algunos compañeros no pudieron evitar derramar algunas lágrimas en los momentos más fuertes o emotivos- la hace buscar el apoyo de su mejor amiga y de algunas otras compañeras de su clase volcando así sus distracciones en ir a karaokes y también en explorar las relaciones románticas tanto con chicos como con chicas. En palabras de la propia directora “mostrar que la bisexualidad es algo que existe, está ahí, es normal y no hay ningún conflicto por ello”.

En un momento se llega a sentir traicionada por estas mismas amistades y relaciones románticas que mantiene por diferentes elementos de su vida que la están afectando hasta que el cambio de profesor, en este caso profesora de sus clases de chino la hacen encontrar una nueva amistad con la que sentirse un poco más comprendida con el mundo que la rodea.

Con una excelente fotografía, la película se para a mostrarnos hasta los más pequeños detalles como cuando las jóvenes se escriben notas en estas mismas clases de chino. Hay una elección muy estudiada y correcta de cada uno de los encuadres, rozando lo que algunos podríamos considerar poesía visual.

Acompañando el ritmo pausado del film tenemos además una majestuosa elección de la banda sonora, destacando en especial algunas de las escenas de los karaokes.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Bryan
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