Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de AMQE:
3
Aventuras. Drama. Bélico. Romance Año 1939. Lady Sarah Ashley (Nicole Kidman) es una aristócrata inglesa frívola y superficial. Un matrimonio sin amor y sin hijos le ha privado de todo lo que que no sea su cuadra de caballos. Convencida de que su marido le es infiel, Sarah viaja desde Londres hasta Darwin, en Australia, para enfrentarse con él. Su guía, Drover (Hugh Jackman), es un ganadero tan tosco como refinada es Sarah. La profunda antipatía que se profesan se ... [+]
1 de marzo de 2009
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sorprende que un director como Baz Luhrmann, que nos tenía acostumbrados a unos trabajos originales y visualmente innovadores, se haya embarcado en una película como “Australia”, una película que en principio parecía diseñada para ser carne de premios y reconocimientos pero que al final se ha quedado como un producto insulso y adocenado sin más argumentos y alicientes que los que puede ofrecer cualquier miniserie televisiva. Y es que esta “Australia” dista mucho de ser ese gran película que a priori uno podía imaginarse. Principalmente por culpa de un guión tan lleno de tópicos, situaciones vistas una y mil veces, con una nula capacidad de sorpresa hacia el espectador y una pareja protagonista inapropiada, sin la menor química entre ellos, lo que hace que la historia de amor quede absolutamente mermada y por consecuente hiera de muerte el resto de la película. Algo de lo que parece consciente el propio director, que acaba apostándolo todo finalmente al personaje del niño aborigen, sabedor de la poca fuerza que transmiten los personajes de Kidman y Jackman.

La película en definitiva, después de un arranque acelerado y con un punto histriónico y cómico que desaparece al poco tiempo para dar paso a un tono melodramático que sin embargo nunca logra emocionar, se acaba convirtiendo en una especie de cuento de buenos y malos, con un desarrollo de la historia casi infantil, pero carente de magia y emoción y con una serie de escenas tan forzadas que Luhrmann se ve obligado a sacarse ases de la manga para arreglar el desaguisado. Así pues solo nos queda deleitarnos con los vistosos paisajes australianos que adornan el largo metraje y con puntuales destellos de la imaginería visual que hasta ahora caracterizaba al director australiano. Lo que por tanto queda claro es que si este pretendía hacer de “Australia” la “película de su filmografía”, su “Titanic” particular, el naufragio, nunca mejor dicho, ha sido total.

Lo mejor: sus paisajes.

Lo peor: que ya nos la sabemos todos.
AMQE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow