Se trata de un película dirigida por Stanley Donen, gran conocedor del cine musical (Cantando bajo la lluvia) que, acompañado en el apartado musical por George e Ira Gershwsin, logran dar al conjunto un gran resultado. El film goza de unos muy buenos números musicales. Los protagonistas son Fred Astaire, que nuevamente demuestra que había nacido para bailar y Audrey Hepburn, como siempre bella y delicada enfundada en los preciosos trajes de Humbert Givenchy, todo ello mezclado entre Nueva York y la ciudad del amor (París). En fin un film que gustará a los aficionados al cine musical y que tampoco defraudará a los seguidores de Audrey Hepburn.