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Voto de Serginhio:
842
Thriller. Drama. Romance
Izumi es la esposa de un exitoso escritor. Su día a día pasa por una anodina rutina y por una relación sin pasión. Un día, Izumi comienza a trabajar en un supermercado vendiendo salchichas; otro, termina involucrándose en una película pornográfica; y finalmente, comienza a ejercer de prostituta. Mientras ella se sumerge en una espiral de sexualidad irrefrenable, un cadáver aparece en el barrio de los hoteles del amor. Nueva muestra de ... [+]
5 de marzo de 2012
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pocos alegatos son tan esclarecedores de la mente de un director como Guilty Of Romance.
Que Sion Sono no tiene todos los patitos en fila lo sabemos por sus trabajos anteriores.
Tanto Love Exposure como Cold Fish son diapositivas de la vida de un director que pareciera exponer todos sus estados de ánimo a través de la pantalla grande.
En Guilty of Romance es llamativa la mimetización entre el director y sus personajes.
Tanto el film como los protagonistas se ponen en marcha recatados, cumplidores, condicionados.
Son los primeros minutos de cinta los que muestran el Sion Sono más recatado, más moderado, siguiéndo cánones prestablecidos.
En la pantalla podemos ver a Izumi (caracterizada por la talentosa Megumi Kagurazaka), la esposa de famoso escritor, sumisa, siempre atenta a las necesidades de su marido, sin vida propia. Un día decide trabajar part time lo que le hará conocer un mundo exterior que le era ajeno. Todos los instintos reprimidos después de tantos años comienzan a aflorar.
Por otro lado, la policía investiga la aparición de un cadáver seccionado en los barrios bajos.
Con la liberación de Izumi (Megumi más hot incluso que en Cold Fish), se libera también Sion Sono. El guión va perdiendo cerebro y pasa a moverse por la pasión de un director que descarrila en la última hora.
Violenta, extrema, instintiva, salvaje, onírica, primitiva. Así es Guilty of Romance, una huella digital de la mano de un director japonés al que se le pueden pedir muchas cosas, pero nunca que corra riesgos.
No apta para cinéfilos racionales.
Que Sion Sono no tiene todos los patitos en fila lo sabemos por sus trabajos anteriores.
Tanto Love Exposure como Cold Fish son diapositivas de la vida de un director que pareciera exponer todos sus estados de ánimo a través de la pantalla grande.
En Guilty of Romance es llamativa la mimetización entre el director y sus personajes.
Tanto el film como los protagonistas se ponen en marcha recatados, cumplidores, condicionados.
Son los primeros minutos de cinta los que muestran el Sion Sono más recatado, más moderado, siguiéndo cánones prestablecidos.
En la pantalla podemos ver a Izumi (caracterizada por la talentosa Megumi Kagurazaka), la esposa de famoso escritor, sumisa, siempre atenta a las necesidades de su marido, sin vida propia. Un día decide trabajar part time lo que le hará conocer un mundo exterior que le era ajeno. Todos los instintos reprimidos después de tantos años comienzan a aflorar.
Por otro lado, la policía investiga la aparición de un cadáver seccionado en los barrios bajos.
Con la liberación de Izumi (Megumi más hot incluso que en Cold Fish), se libera también Sion Sono. El guión va perdiendo cerebro y pasa a moverse por la pasión de un director que descarrila en la última hora.
Violenta, extrema, instintiva, salvaje, onírica, primitiva. Así es Guilty of Romance, una huella digital de la mano de un director japonés al que se le pueden pedir muchas cosas, pero nunca que corra riesgos.
No apta para cinéfilos racionales.
