141/38(29/03/09) Film sobrevalorado hasta el hartazgo. A través de situaciones que rozan el ridículo nos cuentan una historia mil veces contada en el cine, sin originalidad alguna, pero como la realiza un finés, Kaurismäki, director de culto, hay que alabarla, ponerla por las nubes y los exegetas nos cuentan que es una radiografía de la sociedad finlandesa, una milonga, pues el argumento podría pasar en cualquier lugar, es el relato de un perdedor, solitario y con mala suerte, nada nuevo bajo el sol. Su puesta en escena es un plagio de la del cineasta francés Robert Bresson, es austera y mucha de la acción se desarrolla fuera de plano, en lo que lejos de alabarlo yo considero que es por falta de imaginación, ya que la cinta está repleta del vacío imaginativo, por no gastar apenas gasta en diálogos, lo más agradecible es su escaso metraje. No es que sea mala simplemente forma parte del megamontón que no aporta nada al séptimo arte. Fuerza y honor!!!