325/03(04/11/11) Entretenidilla, sin más, esta secuela de Cars, que no está entre los mejores de la factoría Pixar, muchos fuegos de artificio, grandilocuente puesta en escena, escenarios muy bien construidos, viajes por todo el mundo, como telón de fondo una historia de agentes secretos claramente inspirados en James Bond, y con Mate de protagonista, un personaje que chirría, me recuerda al Jar Jar Binks de la saga Star Wars, su forzada comicidad roza lo repelente. El argumento gira en torno a una conspiración para acabar con un nuevo combustible ecológico, el Allinol, para promocionar sus excelencias se organizan tres carreras de coches en las que participa Rayo McQueen, le ayuda en los boxes su gran amigo Mate, pero este por azar se ve envuelto en lio que lo lleva a tener que ayudar al servicio secreto británico como agente de campo para acabar con un complot. El mensaje sobre la amistad resulta muy simplista, aporta nada nuevo, y ante la falta de ideas la historia se decanta por la pirotecnia visual, escenas de acción muy conseguidas, ciudades reales muy logradas, así como la inventada en la Riviera italiana es de gran belleza, algún gag divertido, pero el guión es su gran obstáculo, resulta vacío de hondura, no emociona, le falta alma, no es que sea mala es que es de Pixar, para otra compañía podría ser un éxito pero para la de John Lasseter (también director de esta) es un resbalón, el listón lo tienen muy alto. Su atractivo visual es indiscutible pero esto no va acompañado de alma, de personajes empáticos, se queda en un ameno pasatiempo infantil, pero que incluso con una trama demasiado enrevesada para los niños y demasiado pueril para los adultos. Una de las grandes taras de las dos partes es lo poco empatizables que son los coches representados como personas, no se pueden quitar el estigma de ser meros juguetes a los que se les pone voz, carecen de espíritu, no tienen expresividad alguna, algo que los Toys, los Bichos o el Wall-E desparramaban por la pantalla, estos parecen hechos con la única motivación del merchadising, para que los niños pidan productos relacionados con una película que seguramente la mayoría no ha terminado de ver. Fuerza y honor!!!