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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
5
Western. Intriga Pocos años después de la Guerra de Secesión, una diligencia avanza por el invernal paisaje de Wyoming. Los pasajeros, el cazarrecompensas John Ruth (Kurt Russell) y su fugitiva Daisy Domergue (Jennifer Jason Leigh), intentan llegar al pueblo de Red Rock, donde Ruth entregará a Domergue a la justicia. Por el camino, se encuentran con dos desconocidos: el mayor Marquis Warren (Samuel L. Jackson), un antiguo soldado de la Unión convertido ... [+]
4 de enero de 2016
75 de 108 usuarios han encontrado esta crítica útil
213/16(28/12/15) Fallida cinta de Quentin Tarantino, teniendo en cuenta la mido por lo que se espera de él, un western atípico, pues el género solo parece un McGuffin, el imán en el que enganchar al espectador, pues más bien parece una especie de obra de teatro versionando un libro de Agatha Christie, por supuesto con un misterio por desvelar. Posee un arranque atractivo, con ese marco incomparable de un vasto territorio de montaña nevado y surcado por una diligencia de seis caballos, con esa presentación del personaje de Samuel L. Jackson, la de Kurt Russell, la de Jennifer Jason Leigh y el posterior de Walton Goggins, tras este inicio se cambia de registro para que el ochenta por ciento del metraje suceda en una gran habitación, donde se suman más personajes, la tensión está latente pero a fuerza de hablar y hablar comienza a caerse, ello también por culpa de unos personajes bastante adustos, grises, que hacen de la amoralidad su modo de ser, esto nos aleja de la trama, cayendo por momentos en lo peor, el aburrimiento, algo que debía ser sacrilegio para QT, y es que mi es que es una historia sin fuerza, sin ambigüedades, sin complejidades, todos son malos, detestables, agrios, y lo que es peor lo que te cuentan carece de profundidad, de poder de sugestión, hablan y se matan, y entre medio nada de sustancia. A lo que se suman actores desaprovechados, un ritmo que discurre a trompicones, con una duración megaexcesiva para lo poco que cuenta, la síntesis no es el fuerte QT, una violencia extemporánea, con un gore que da grima, nada aporta más allá del impacto visual, dando munición a aquellos que piensan que hace apología de la violencia, pues aquí adolece de justificación.

La historia acontece poco después de acabada la Guerra Civil USA, en el centro del relato está una parada de diligencias, Minnie´s Haberdashery, en Wyoming de camino a la población de Red Rock, al que van a parar un puñado de personajes durante una gran tormenta de nieve que les impide continuar su camino. Allí llega un cazarecompensas, John Ruth (Kurt Rusell), con su presa, Daisy Domergue (Jennifer Jason Leigh), otro cazarecompensas es el mayor unionista Marquis Warren (Samuel L. Jackson), con 3 muertos, un hombre que dice ser el próximo sheriff de Red Rock, Chris Mannix (Walton Goggins), el general confederado Sandy Smithers (Bruce Dern), el hombre que dice ser el verdugo de Red Rock, Oswaldo Mobray (Tim Roth), un mexicano, Bob (Demian Bichir) y Joe Gage (Michael Madsen), un pistolero.

Parece QT inspirarse en sí mismo para la premisa del relato, lo de encerrar a un grupo de tipos duros en un lugar, como ya hizo en su debut en cine con “Reservoir Dogs” (1992), y recurre a los flash-backs para juguetear con los tiempos, como ha hecho en la mayor parte de su filmografía. Nos habla del racismo, de la delgada línea que separa la justicia del linchamiento, de la hipocresía de las leyes, de las huellas que dejan las guerras acabadas (oficialmente, pero no entre las personas), y sobre todo de la delgada franja que separa el bien del mal. QT hace una alegoría con la posada Minnie, la hace una especie de limbo-purgatorio donde deben van a parar un puñado de tipos malos de diferentes condiciones sociales y razas antes de ir al Averno. Un cineasta que admira a Sergio Leone es paradójico, que al contrario que el italiano que dotaba de laconismo taciturno a sus protagonistas, QT les dé una labia incansable, y lo peor aquí es que resulta cansino, pues cae en la redundancia, en un bucle inacabable, de situaciones repetitivas, lo cual repercute en su ritmo, provocando que cuando llegue el clímax final el espectador (por lo menos yo) este alejado de la historia y le dé igual lo que les pase a los personajes, si mueren, viven o son mediopensionistas, la duración se alarga hasta parecer infinita, pues se atranca. QT se sirve del contexto del tiempo, la reciente post-Guerra Civil para mostrarnos las grietas aún existentes entre vencedores y vencidos, y sobre todo entre negros y confederados del sur, esto estaría bien y si lo manejara con sutilidad, pero es mostrado con brocha gorda, con trazo grueso, coronado por la historia que cuenta Marquis sobre el hijo del General confederado y el mismo, sobre como lo hizo andar por el monte nevado desnudo para acabar obligándole a punta de pistola a .., lo siento, pero yo a esto lo llamo vulgaridad y mal gusto, no tiene gracia, asimismo parece que QT tiene fijación por los penes de los negros, como ya demostró en “Django encadenado”. Todo esto coronado por un final anticlimático y tosco, pareciendo una glorificación de la violencia, de tomarse la justicia por tu mano. También se puede hablar de su narcisismo y endiosamiento en el que parece haber caído, como esos adanistas créditos iníciales en los que remarca que es su octavo largometraje, un acto de pedantería, a lo que se añade su voz en off en el último tercio, sin sentido alguno, sin razón orgánica para ponerla, solo parece tener el sentido pretencioso de incluirse él en la acción, esta voz aparece en un flash-back que resulta tan innecesario como la voz, aporta de poco a nada, un artificio que se siente metido con calzador.

Tarantino como es habitual en él cuela en sus obras homenajes a su cinefilia, como a Sergio Leone, con esa imagen del principio con la cámara tras una cruz, inspirada en “Por un puñado de dólares” (1964), o planos subjetivos en primera persona influenciados por “El Bueno, el Feo y el Malo” (1966), o a “Centauros del desierto” (1966) de John Ford, en la toma desde el establo enmarcando el exterior por las puertas, e incluso bebe de “Carrie” de Brian de Palma (1976), por una de los rostros que se le quedan a uno de los protagonistas. (sigue en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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