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Voto de TOM REGAN:
7
7,4
28.355
Drama
Filme surrealista, todo un clásico del cine de arte y ensayo, una obra única y de culto, fruto de la poderosa imaginación de dos jóvenes mentes -Buñuel tenía 29 años y Dalí 25- poseedoras de un talento tan singular como genial. Según declaraciones del propio Luis Buñuel, "Un perro andaluz fue un film antivanguardista, nada tenía que ver con la vanguardia cinematográfica de entonces. Ni en el fondo ni en la forma (...) también se iba a ... [+]
4 de agosto de 2019
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104/14(20/07/19) Cortometraje icónico del surrealismo, 17 minutos de duración para la ópera prima del director de Calanda, Luis Buñuel, con guión propio y del artista catalán Dalí. Se estrenó hace 90 años (6 de junio de 1929) en una presentación limitada en el Studio des Ursulines en París, pero se hizo popular y duró ocho meses en cartel. He de decir que mis sensaciones ante esta obra son contradictorias, por un lado está el atractivo antropológico de estar ante una labor pionera en el campo del surrealismo cinéfilo, con momentos visualmente cautivadores, pero el hecho de ser set-pieces sueltas sin cosido alguno orgánico me aleja de lo que veo, me deja tibio, no hay capacidad de emoción, solo atisbos de sorpresa por el tropel de momentos “extraños”, saltándose cualquier capacidad de comprensión. Lo bueno es que al ser apenas un cuarto de hora no hay tiempo para que el espectador se aburra o desconecte del todo, con lo que me queda una reacción con muchos picos, sobre todo (aparte del mítico del ojo rajado) el del tipo que arrastra los dos pianos, con un carrusel de elementos de proporciones freudianas.
Film nacido de la confluencia de dos sueños, Buñuel paso unos días en la casa de su amigo Dali en Figueras, le contó un sueño había tenido, una nube desflecada cortaba la luna y una cuchilla de afeitar hendía un ojo. Dali respondió con su propio sueño sobre una mano llena de hormigas. "Y si empezamos allí y hacemos una película?" Le preguntó a Buñuel, y la hicieron. Escribieron el guión juntos basado en el concepto de emociones humanas reprimidas, y Buñuel dirigió. La película fue financiada por la madre de Buñuel y filmada en Le Havre y Paris en los estudios Billancourt durante un período de 10 días en marzo de 1928, película muda en blanco y negro, de 35 mm, con un tiempo de ejecución de 17 minutos, y una longitud física de 430 metros. Buñuel dejó claro en sus escritos que, entre Dalí y él mismo, la única regla para la escritura del guión era: "No se aceptaría ninguna idea o imagen que pudiera prestarse a una explicación racional de ningún tipo".
Por influencia de teorías de Sigmund Freud, el surrealismo admitía imágenes e ideas oníricas dentro de sus postulados. Toda la cinta puede definirse como una sucesión de sueños encadenados. Posee una de las secuencias más impactantes de todo el cine, como es la navaja que secciona un ojo de mujer con una navaja de afeitar, que la revista premiere clasificó la escena de apertura como el 10º de "Los 25 momentos más impactantes en la historia de la película".
Buñuel y Dalí hacen un canto al surrealismo puro, cual cuadro del pintor gerundense en movimiento, un delirio onírico sin hilo narrativo, hecha a machetazos de secuencias impactantes, donde buscarle coherencia es misión imposible, con saltos temporales arbitrarios sin sentido, donde el sentido común y la lógica son entes inexistentes, es un encadenado de sueños y pesadillas abruptas que saltan de un escenario a otro de modo caótico, donde el simbolismo y alegorías visuales son constantes, a modo de cascada de viñetas, ello con resonancias poético-críticas, donde la provocación es la norma, donde el convencionalismo imperante es implosionada, siendo sus objetivos la represión sexual, la lujuria, la educación, o la hipocresía de la Iglesia. El título de “Un perro andaluz” fue elegido porque no guardaba relación alguna con los temas del filme. El plano final de la película de los dos amantes enterrados en la arena del desierto está conectado en última instancia con el Duelo a garrotazos de Goya y con El Ángelus de Millet, y aparece tanto en cuadros de Dalí como en Viridiana y Belle de jour de Buñuel.
Comienza con tarjeta de título que dice "Érase una vez". Un hombre de mediana edad (Luis Buñuel) afila su navaja de afeitar en la puerta de su balcón y prueba la afeitadora en su pulgar. Luego abre la puerta, y ociosamente toca la navaja mientras mira a la luna, a punto de ser envuelta por una nube delgada, desde su balcón. Hay un corte en un primer plano de una mujer joven (Simone Mareuil ) en manos del hombre. Ella mira tranquila al frente mientras él acerca la navaja cerca de su ojo. Se produce otro corte en la luna al ser “rasgada” por la nube, luego un corte hasta el cierre de una mano que corta el ojo de un animal (aunque el efecto subliminal es el que es el de la mujer) con la navaja (lo que ocurre tan rápidamente que el espectador puede creer que era el ojo de la mujer), y el vítreo, el humor se derrama de el; Este prólogo shockeante actúa como cebo y catalizador de las esperanzas del espectador de estar ante algo brillante.
Hay una escena donde una mujer está sentada en una silla, leyendo, tira el libro a un lado cuando nota al hombre que se ha caído. La imagen que muestra cuando está abierta es una reproducción de un cuadro de Vermeer, a quien Dalí admiraba mucho y se refería a menudo en sus propios cuadros.
Hay un entrelazado de secuencias neurálgicas que los creadores Dalí y Buñuel sueltan de modo anárquico, pretendiendo que sea el espectador el que intente dar explicación alegórica a lo que ve, en cierto modo me recuerdan a los sastres de “El traje del Emperador”. Vemos a una joven que mira una mano de hombre de la cual en el centro de la palma surge un agujero del que (en primer plano) emergen cientos de hormigas, la mano se transmuta en un erizo, en este juego subliminal de hallar respuestas a lo críptico se podría entender como un estigma católico podrido, crítica al radicalismo, o tal vez es otra cosa (¿?); Vemos una axila de mujer peluda, me niego a buscar significado; Hay una mano amputada en mitad de la calle rodeada de gente, que es golpeada por el bastón de una mujer, siendo retenida la multitud por la policía, mano colocada por los agentes en una caja que entregan a la mujer, y me sigo negando a buscarle significado;... (sigue en spoiler)
Film nacido de la confluencia de dos sueños, Buñuel paso unos días en la casa de su amigo Dali en Figueras, le contó un sueño había tenido, una nube desflecada cortaba la luna y una cuchilla de afeitar hendía un ojo. Dali respondió con su propio sueño sobre una mano llena de hormigas. "Y si empezamos allí y hacemos una película?" Le preguntó a Buñuel, y la hicieron. Escribieron el guión juntos basado en el concepto de emociones humanas reprimidas, y Buñuel dirigió. La película fue financiada por la madre de Buñuel y filmada en Le Havre y Paris en los estudios Billancourt durante un período de 10 días en marzo de 1928, película muda en blanco y negro, de 35 mm, con un tiempo de ejecución de 17 minutos, y una longitud física de 430 metros. Buñuel dejó claro en sus escritos que, entre Dalí y él mismo, la única regla para la escritura del guión era: "No se aceptaría ninguna idea o imagen que pudiera prestarse a una explicación racional de ningún tipo".
Por influencia de teorías de Sigmund Freud, el surrealismo admitía imágenes e ideas oníricas dentro de sus postulados. Toda la cinta puede definirse como una sucesión de sueños encadenados. Posee una de las secuencias más impactantes de todo el cine, como es la navaja que secciona un ojo de mujer con una navaja de afeitar, que la revista premiere clasificó la escena de apertura como el 10º de "Los 25 momentos más impactantes en la historia de la película".
Buñuel y Dalí hacen un canto al surrealismo puro, cual cuadro del pintor gerundense en movimiento, un delirio onírico sin hilo narrativo, hecha a machetazos de secuencias impactantes, donde buscarle coherencia es misión imposible, con saltos temporales arbitrarios sin sentido, donde el sentido común y la lógica son entes inexistentes, es un encadenado de sueños y pesadillas abruptas que saltan de un escenario a otro de modo caótico, donde el simbolismo y alegorías visuales son constantes, a modo de cascada de viñetas, ello con resonancias poético-críticas, donde la provocación es la norma, donde el convencionalismo imperante es implosionada, siendo sus objetivos la represión sexual, la lujuria, la educación, o la hipocresía de la Iglesia. El título de “Un perro andaluz” fue elegido porque no guardaba relación alguna con los temas del filme. El plano final de la película de los dos amantes enterrados en la arena del desierto está conectado en última instancia con el Duelo a garrotazos de Goya y con El Ángelus de Millet, y aparece tanto en cuadros de Dalí como en Viridiana y Belle de jour de Buñuel.
Comienza con tarjeta de título que dice "Érase una vez". Un hombre de mediana edad (Luis Buñuel) afila su navaja de afeitar en la puerta de su balcón y prueba la afeitadora en su pulgar. Luego abre la puerta, y ociosamente toca la navaja mientras mira a la luna, a punto de ser envuelta por una nube delgada, desde su balcón. Hay un corte en un primer plano de una mujer joven (Simone Mareuil ) en manos del hombre. Ella mira tranquila al frente mientras él acerca la navaja cerca de su ojo. Se produce otro corte en la luna al ser “rasgada” por la nube, luego un corte hasta el cierre de una mano que corta el ojo de un animal (aunque el efecto subliminal es el que es el de la mujer) con la navaja (lo que ocurre tan rápidamente que el espectador puede creer que era el ojo de la mujer), y el vítreo, el humor se derrama de el; Este prólogo shockeante actúa como cebo y catalizador de las esperanzas del espectador de estar ante algo brillante.
Hay una escena donde una mujer está sentada en una silla, leyendo, tira el libro a un lado cuando nota al hombre que se ha caído. La imagen que muestra cuando está abierta es una reproducción de un cuadro de Vermeer, a quien Dalí admiraba mucho y se refería a menudo en sus propios cuadros.
Hay un entrelazado de secuencias neurálgicas que los creadores Dalí y Buñuel sueltan de modo anárquico, pretendiendo que sea el espectador el que intente dar explicación alegórica a lo que ve, en cierto modo me recuerdan a los sastres de “El traje del Emperador”. Vemos a una joven que mira una mano de hombre de la cual en el centro de la palma surge un agujero del que (en primer plano) emergen cientos de hormigas, la mano se transmuta en un erizo, en este juego subliminal de hallar respuestas a lo críptico se podría entender como un estigma católico podrido, crítica al radicalismo, o tal vez es otra cosa (¿?); Vemos una axila de mujer peluda, me niego a buscar significado; Hay una mano amputada en mitad de la calle rodeada de gente, que es golpeada por el bastón de una mujer, siendo retenida la multitud por la policía, mano colocada por los agentes en una caja que entregan a la mujer, y me sigo negando a buscarle significado;... (sigue en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
… La mujer es arrollada por un coche y un grupo de personas la rodean, significado a esto (puaj!); Un hombre y una mujer miran desde una ventana a la calle, esto parece excitarlo a él, que entonces entran en el piso y él le agarra ella por los pechos, ella se resiste en principio, luego se deja y la imaginación de él la imagina (se visualiza) desnuda por los senos y el trasero, entonces la mujer vuelve a repeler al hombre empujándolo, y arrinconándose protegiéndose con una raqueta, pero de repente el hombre toma dos cuerdas y arrastra dos pianos de cola que contienen burros muertos y podridos (los burros en descomposición son una referencia a la popular novela infantil Platero y yo de Juan Ramón Jiménez, que Buñuel y Dalí odiaban), tablillas de piedra que contienen los Diez Mandamientos, dos calabazas, y dos sacerdotes bastante desconcertados (interpretados por Jaime Miravilles y Salvador Dalí) que están unidos por las cuerdas. Como él no puede perseguir, la joven se escapa de la habitación. El joven la persigue, pero ella atrapa su mano, que está infestada de hormigas (que claramente influenció a David Lynch en la oreja encontrada en “Blue Velvet”), en la puerta. Ella encuentra al joven en la habitación contigua, vestido con el atuendo de su monja en la cama. Es el mejor tramo del cortometraje, el que creo entender mejor (lo cual no es poco), le veo la escenificación de la represión sexual producida por nuestra educación apoyada en nuestra cultura judeo-cristiana; Un tipo dispara a otro que sostiene dos libros pero estos se convierten en dos pistolas (¿?); Un hombre muere en una habitación por los disparos de las pistolas que han salido de los libros (crítica a la educción y sus marciales castigos, y loa la rebelión contra el sistema, o eso creo entender), lo hace en una habitación, pero al caer el tipo está en medio del campo y sus manos antes de morir resbalan por la espalda de una mujer, que al desvanecerse él ella ha desaparecido (¿?); Un tipo entra en un apartamento y en la pared ve una polilla de la muerte (lleva este nombre por llevar en su espalda l dibujo de una calavera, por cierto, la misma que aparece en “El silencio de los corderos”), tras esto en la habitación también hay una mujer que mira al hombre, este se tapa la boca y al retirarla ya no tiene boca, la mujer responde a esto pintándose los labios (¿?), entonces al hombre le aparece un puñado de bello en la boca, la mujer horrorizada se mira el axila, y no tiene pelos (¿?), la mujer le hace burla y le enseña la lengua, abriendo la puerta y yéndose, y tras la puerta una ventisca, y es que está en una playa (¿?). Allí la mujer se encuentra con un tipo con el que se abrazan y paseando, encuentran en la arena la caja de la mano y unas ropas de monja (¿?), se alejan de allí y vemos sobre impresionado “En verano”, vemos un dibujo de dos cuerpos semi enterrados en la arena (¿?), de clara resonancia al cuadro de Goya de la pelea a garrotazos.
Hacer la crítica del corto, solo tiene sentido si se describen las diferentes escenas, pues todo carece de sentido racional y orgánico, donde el sentido lógico de espacio tiempo queda pulverizado, pues los personajes más pronto están en una ciudad que como que abren una puerta y están en la playa, y el tiempo es un ente con el que jugar con esos intertítulos: “Erase una vez”, “Ocho años después”, “Hacia las tres de la mañana”, “Dieciséis años antes”, “En primavera”, pero esto arbitrariamente, sin que estos saltos temporales se vena mínimamente reflejados en los personajes.
En conjunto, me queda un corto con más fama que poder de emocionar o remover conciencias, se mueve entre lo incomprensible y lo obvio, pero todo a base de brochazos de impactos visuales, sin capacidad de sutilidad, aunque con el homérico mérito de ser precursor del estilo cine-surrealista. Fuerza y honor!!!
Para leer más sobre el film ir a: https://conloslumiereempezo.blogspot.com/2019/07/un-perro-andaluz.html
Hacer la crítica del corto, solo tiene sentido si se describen las diferentes escenas, pues todo carece de sentido racional y orgánico, donde el sentido lógico de espacio tiempo queda pulverizado, pues los personajes más pronto están en una ciudad que como que abren una puerta y están en la playa, y el tiempo es un ente con el que jugar con esos intertítulos: “Erase una vez”, “Ocho años después”, “Hacia las tres de la mañana”, “Dieciséis años antes”, “En primavera”, pero esto arbitrariamente, sin que estos saltos temporales se vena mínimamente reflejados en los personajes.
En conjunto, me queda un corto con más fama que poder de emocionar o remover conciencias, se mueve entre lo incomprensible y lo obvio, pero todo a base de brochazos de impactos visuales, sin capacidad de sutilidad, aunque con el homérico mérito de ser precursor del estilo cine-surrealista. Fuerza y honor!!!
Para leer más sobre el film ir a: https://conloslumiereempezo.blogspot.com/2019/07/un-perro-andaluz.html