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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
8
Acción. Drama India, años 20 del siglo XX. Tras el secuestro de una niña perteneciente a una tribu marginada, Bheem viajará a Delhi para su rescate. En su travesía se cruzará con Rama Raju, un oficial del Raj que tiene por misión perseguirlo para meterlo a la cárcel. (FILMAFFINITY)
6 de diciembre de 2022
1 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
380/24(25/11/22) Jubiloso acercamiento al más descacharrante estilo hindú de hacer cine, una bacanal donde se dan cita todos su excesos y marcas de identidad, para llegar a parecer una parodia de sí misma. Este es un drama épico de acción y aventuras híper realista en idioma telugu (idioma que se habla principalmente en los estados del sur de la India) dirigido por S. S. Rajamouli, quien co-guionizó con V. Vijayendra Prasad, el padre de Rajamouli, V. Vijayendra Prasad contó la historia original en la que se basa el libreto. Protagonizada por N. T. Rama Rao Jr. & Ram Charan, estando como el sádico y caricaturesco villano el británico Ray Stevenson. Centrándose el argumento en dos revolucionarios indios reales, Alluri Sitarama Raju (Charan) y Komaram Bheem (Rama Rao), su amistad (esto es falso, pues nunca se cruzaron ambos) y su lucha contra el Raj-Gobernador británico Scott encarnado por Ray Stevenson (en una actuación plana de malo Aterrador. Ambientada en la década de 1920, la trama explora el período indocumentado (y ficticio) de sus vidas cuando ambos revolucionarios optaron por pasar a la oscuridad antes de comenzar la lucha por su país centrado en Nueva Delhi. Rajamouli encontró historias sobre las vidas de Rama Raju y Bheem y conectó las coincidencias entre ellos, imaginando lo que habría pasado si se hubieran conocido y hubieran sido amigos. En la vida real, Bheem era un líder del pueblo Gondi que colaboró con otros grupos para resistir a los terratenientes y las empresas mineras que invadían las tierras tribales. Mientras Raju lideró ataques guerrilleros contra estaciones de policía imperiales, incautando armas y municiones británicas para nivelar el campo de juego entre colonizadores y colonizados.

Son tres horas trepidantes de RRR (Rise, Roar, Revolt), con su ‘InteRRRmission’, donde se mezcla la acción más delirante, con números musicales rimbombantes muy Bollywood (El primo mayor de Rajamouli y colaborador habitual, MM Keeravani, compuso la partitura y la banda sonora de la película). Una historia más simple que el mecanismo de un martillo, todo se atiene a la batalla del Bien vs Mal, simplista critica al colonialismo (británico), ingleses son ogros sin sentimientos, racistas, sanguinarios, despóticos, sádicos, alejados de los retratos de la mayoría de films famosos (“La carga de la Brigada Ligera”, “Gunga Din” o “El hombre que pudo reinar”), el Raj Británico les espeta a sus hombres que no desperdicien buenas balas británicas con escoria marrón cuando pueden romperles sesos fácilmente. Su esposa está a su altura (o más) raptando a niñas, o pidiendo fustiguen a un preso con un látigo con espinas. Todo sin matices.

Se hace una oda a la amistad, lo que se llama un bromance cargado de testosterona, con los componentes de hablar del sacrificio por un bien mayor, lo que se puede denominar sentido del deber. Para disfrutarla hay que anular de nuestra mente que existen las leyes de la física, y los héroes, son en realidad súper-héroes semi-dioses con capacidades omnipotentes, sin que en realidad sepamos de donde le vienen estas cualidades sobrehumanas.

‘Dones’ supra terrenales mostrados con despliegue de efectos visuales y cinematografía radiantes de cromatismos fulgentes, todo un tsunami de recursos estéticos que desborda la pantalla en su imaginación entusiasta puesta al servicio del disfrute del espectador, CGI (alterna escenas bien manejado esto y otras cutres como las de los animales que cantan su falsedad), con mezcla de slows, congelados, peleas con creativas coreografías toon donde los cuerpos son impulsados hacia el infinito, y donde un solo hombre (o dos) pueden provocar un ‘genocidio’ imposible de detener, incluso una moto en marcha es cogida como arma de mano, con persecuciones furibundas, hay un niño con un solo rifle capaz de exterminar a un batallón inglés, con explosiones disparatadas, escenas de salvamento alocadas (epítome la que hacen los protas del niño bajo el puente), componiendo planos constantemente para esculpir en mármol, con acrobacias inundadas de fantasía, los límites de lo ridículo son rebasados hasta ser algo que disfrutas en su espíritu de jolgorio de comic. La sutileza ni está, ni se le espera. Una gamberrada que no hay que tomar mínimamente en serio, donde la inventiva es un chute de alegría sensorial, donde el humor mana del desfase de lo que vemos. Y para darle un toque hindi se le endosa un toque místico, donde Raju (lleva un carruaje en llamas y lanza flechas ardiendo) representa el Fuego y Bheem el Agua (los animales del bosque son sus aliados).

La mecha se enciende para una reunión explosiva de estos hombres excepcionales cuando el gobernador británico Scott Buxton (Ray Stevenson) y su cruel esposa Catherine (Alison Doody) van a los barrios bajos de un pueblo de Gond, acompañados por un contingente de soldados fuertemente armados. Catherine está encantada con una niña llamada Malli (Twinkle Sharma) y afirma que la niña es un juguete divertido para entretener a los invitados en su casa palaciega de Delhi. Todo este inicio con el precioso tema “Komma Uyyala”.

Tras ello está la presentación de los protagonistas. Primero vemos a Bheem (N.T. Rama Rao Jr.), en medio del bosque de Adilabad, que se enfrenta primero a un lobo gigante y luego a un tigre aún más grande, para intentar llevarlo a una trampa, ello en un ritual de entrenamiento previo a la misión de intentar dar con su hermana Malli y rescatarla. Al otro, Raju (Ram Charan), como soldado británico dentro de un cuartel asediado por cientos de hindús, ante el requerimiento de un superior para atrapen al cabecilla de los insurrectos salta al exterior para en medio de una multitud linchadora se deshace de la turba una y otra vez, hasta hacerse con el líder y tras innumerables golpes lo lleva al interior del cuartel. Raju, en realidad es un infiltrado ferozmente determinado de Andhra Pradesh, a hacerse con fusiles para armar a su pueblo;... (sigo en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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