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Voto de TOM REGAN:
5
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Bélico. Acción
Narra la verdadera historia de Audie Murphy (interpretado por él mismo), el soldado más condecorado del ejército norteamericano de toda la Segunda Guerra Mundial. Incorporado al ejército a los 17 años, el film relata sus vivencias en una guerra llena de accion y duros combates, llegando a participar en el frentes en Italia, Francia y Alemania. Por su participacion en el conflicto llegó a conseguir hasta dos docenas de las más altas ... [+]
13 de marzo de 2022
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
79/13(12/03/22) Funcional y frugal de medios film bélico hecho a mayor gloria hagiográfica de Audie Murphy interpretándose a sí mismo (su cara aniñada ayuda a hacer algo verosímil que con 30 años tengamos que verlo con 17), el soldado más condecorado en la historia USA, en este caso por sus hazañas en la WWII. Dirigido de modo rutinario por un Jesse Hibbs (experimentado en series tv, y productos serie b en cine de westerns, tuvo varios trabajos con Murphy), adaptando el guión de Gil Doud (“Bahía Negra”), basándose en la autobiografía homónima de 1949, relato de las experiencias de Murphy en la Segunda Guerra Mundial como soldado en el ejército de los EE. UU. El libro fue escrito por su amigo, David "Spec" McClure, quien sirvió en el Cuerpo de Señales del Ejército de los EE. UU. durante la contienda.
El joven Audie Murphy (Gordon Gebert) crece en una familia grande y pobre de aparceros en Texas. Su padre los abandona alrededor de 1939-1940, dejando a su madre (Mary Field) apenas capaz de alimentar a sus nueve hijos. Como hijo mayor, Murphy trabaja desde una edad temprana para su vecino, el Sr. Houston, agricultor local, para ayudar a mantener a sus hermanos. Murphy y el Sr. Houston (John Bryant) son interrumpidos mientras trabajan y escuchan el anuncio de radio sobre el ataque a Pearl Harbor. Cuando su madre muere en 1941, Audie se convierte en cabeza de familia. Sus hermanos y hermanas son enviados a una hermana mayor, Corrine. Luego, el Sr. Houston convence a Murphy de alistarse en el ejército para mantenerse. Murphy es rechazado por los paracaidistas de la Marina, la Armada y el Ejército debido a su pequeño tamaño y apariencia juvenil. Finalmente, el Ejército lo acepta como un soldado de infantería ordinario. Después del entrenamiento básico y el entrenamiento de infantería, Murphy es enviado a la 3.ª División de Infantería en el norte de África, como reemplazo.
Sus compañeros de equipo incluyen: Johnson (Marshall Thompson), un hombre que dice ser mujeriego; Brandon (Charles Drake), un hombre que abandonó a su esposa e hija; Kerrigan (Jack Kelly), un hombre que bromea en momentos inusuales; Kovak (Ricahrd Castle), un inmigrante polaco que quiere convertirse en ciudadano estadounidense; Swope (Felix Noriego), llamado "Jefe" por sus compañeros de escuadrón, un nativo americano que fuma mucho puros, y Valentino (Paul Picerni)que tiene parientes en Nápoles.
Obra donde se pondera la figura de Audie como epítome del buena americano, llegando a parecer un film patrocinado por el ejército estadounidense por como presenta la odisea de este mítico soldado, de cómo un hombre pequeñito, sin estudios, proveniente de un hogar humilde, abandonado por su padre y con su madre fallecida, debe con 17 años valerse por sí mismo, alentado por un mentor que le pinta el ejército como el paraíso terrenal, entra de militar y allí encuentra su lugar en el mundo. Un ser amable, cariñoso, noble, sin grieta alguna. Allí formará parte de un grupo de soldados donde reinará la camaradería (tema remanente sobre la amistad), en medio de clichés mil veces vistos, donde todo huele a sobado, personajes secundarios estereotipados, sin fondo alguno, interpretados de modo mecánico, sin alma.
Tenemos unas escenas de batallas que resultan de todo menos creíbles, huele a distancia que no se movieron de los USA para filmar (rodada en Fort Lewis y Yakima Training Center, cerca de Yakima- Washington), pues ni siquiera se molestaron en segundas unidades o material de archivo para enmarcar de algún modo el periplo de Murphy por África, Italia, Francia o Alemania. El propio Murphy se quejó de esta falta de realismo, pues el tramo de la batalla de Anzio acontece con el suelo embarrado por la constante lluvia, y aquí es todo soleado (mención aparte es para la edición en que desde un telefonillo señalan un objetivo y vemos un buque de guerra en plena mar disparar, menuda tosquedad de montaje), y en Colmar el escenario estaba nevado por todos lados, y aquí ni está ni se espera el blanco. Todo con el aroma retro de los 50, me refiero por como resulta aséptico en mostrar la carnicería inherente a este conflicto salvaje, pues los soldados caen en tropel por disparos, pero la sangre no se ve por lado alguno. Es la guerra como una aventura de campo donde los nazis son unos ineptos disparando, no me explico como pudieron hacerse con Europa?
Tenemos unos arranques de heroísmo (la toma de una granja estratégica en medio de la nada, exterminar un nido de ametralladoras y como acaba con una soldados nazis desde la ametralladora de un tanque Sherman que arde) de Audie que resultan ridículos vistos hoy, me resulta un sketch de José Mota como acaba con los alemanes a pecho descubierto mientras estos caen como moscas ante su presencia, como si un halo letal les cubriera ante su presencia. No dudo que Audie sea un Héroe, pero si dudo que fuera como se muestra, sin mostrar sentimiento alguno, cual Terminator su comportamiento. Por cierto, el modo de encarar a Audie es plana, nunca se nos muestra como una figura de carne y hueso, en el afán de elevarlo a los altares, la dirección se olvida de humanizarlo, pues nunca le vemos con dilemas morales, siempre seguro de sí mismo, actúa y punto, es lo que debe hacer en cada momento porque es el héroe. Tipo tan humilde que rechaza una y otra vez el ascenso, nunca reclama nada para sí mismo, ayuda a sus compañeros, los protege, el siempre delante. Esto va en contra de la realidad, pues se sabe que Audie sufrió Síndrome de Estrés Postraumático, pero esto hubiera sido mostrar debilidad en la santificación urbi et orbi del Icono.
El joven Audie Murphy (Gordon Gebert) crece en una familia grande y pobre de aparceros en Texas. Su padre los abandona alrededor de 1939-1940, dejando a su madre (Mary Field) apenas capaz de alimentar a sus nueve hijos. Como hijo mayor, Murphy trabaja desde una edad temprana para su vecino, el Sr. Houston, agricultor local, para ayudar a mantener a sus hermanos. Murphy y el Sr. Houston (John Bryant) son interrumpidos mientras trabajan y escuchan el anuncio de radio sobre el ataque a Pearl Harbor. Cuando su madre muere en 1941, Audie se convierte en cabeza de familia. Sus hermanos y hermanas son enviados a una hermana mayor, Corrine. Luego, el Sr. Houston convence a Murphy de alistarse en el ejército para mantenerse. Murphy es rechazado por los paracaidistas de la Marina, la Armada y el Ejército debido a su pequeño tamaño y apariencia juvenil. Finalmente, el Ejército lo acepta como un soldado de infantería ordinario. Después del entrenamiento básico y el entrenamiento de infantería, Murphy es enviado a la 3.ª División de Infantería en el norte de África, como reemplazo.
Sus compañeros de equipo incluyen: Johnson (Marshall Thompson), un hombre que dice ser mujeriego; Brandon (Charles Drake), un hombre que abandonó a su esposa e hija; Kerrigan (Jack Kelly), un hombre que bromea en momentos inusuales; Kovak (Ricahrd Castle), un inmigrante polaco que quiere convertirse en ciudadano estadounidense; Swope (Felix Noriego), llamado "Jefe" por sus compañeros de escuadrón, un nativo americano que fuma mucho puros, y Valentino (Paul Picerni)que tiene parientes en Nápoles.
Obra donde se pondera la figura de Audie como epítome del buena americano, llegando a parecer un film patrocinado por el ejército estadounidense por como presenta la odisea de este mítico soldado, de cómo un hombre pequeñito, sin estudios, proveniente de un hogar humilde, abandonado por su padre y con su madre fallecida, debe con 17 años valerse por sí mismo, alentado por un mentor que le pinta el ejército como el paraíso terrenal, entra de militar y allí encuentra su lugar en el mundo. Un ser amable, cariñoso, noble, sin grieta alguna. Allí formará parte de un grupo de soldados donde reinará la camaradería (tema remanente sobre la amistad), en medio de clichés mil veces vistos, donde todo huele a sobado, personajes secundarios estereotipados, sin fondo alguno, interpretados de modo mecánico, sin alma.
Tenemos unas escenas de batallas que resultan de todo menos creíbles, huele a distancia que no se movieron de los USA para filmar (rodada en Fort Lewis y Yakima Training Center, cerca de Yakima- Washington), pues ni siquiera se molestaron en segundas unidades o material de archivo para enmarcar de algún modo el periplo de Murphy por África, Italia, Francia o Alemania. El propio Murphy se quejó de esta falta de realismo, pues el tramo de la batalla de Anzio acontece con el suelo embarrado por la constante lluvia, y aquí es todo soleado (mención aparte es para la edición en que desde un telefonillo señalan un objetivo y vemos un buque de guerra en plena mar disparar, menuda tosquedad de montaje), y en Colmar el escenario estaba nevado por todos lados, y aquí ni está ni se espera el blanco. Todo con el aroma retro de los 50, me refiero por como resulta aséptico en mostrar la carnicería inherente a este conflicto salvaje, pues los soldados caen en tropel por disparos, pero la sangre no se ve por lado alguno. Es la guerra como una aventura de campo donde los nazis son unos ineptos disparando, no me explico como pudieron hacerse con Europa?
Tenemos unos arranques de heroísmo (la toma de una granja estratégica en medio de la nada, exterminar un nido de ametralladoras y como acaba con una soldados nazis desde la ametralladora de un tanque Sherman que arde) de Audie que resultan ridículos vistos hoy, me resulta un sketch de José Mota como acaba con los alemanes a pecho descubierto mientras estos caen como moscas ante su presencia, como si un halo letal les cubriera ante su presencia. No dudo que Audie sea un Héroe, pero si dudo que fuera como se muestra, sin mostrar sentimiento alguno, cual Terminator su comportamiento. Por cierto, el modo de encarar a Audie es plana, nunca se nos muestra como una figura de carne y hueso, en el afán de elevarlo a los altares, la dirección se olvida de humanizarlo, pues nunca le vemos con dilemas morales, siempre seguro de sí mismo, actúa y punto, es lo que debe hacer en cada momento porque es el héroe. Tipo tan humilde que rechaza una y otra vez el ascenso, nunca reclama nada para sí mismo, ayuda a sus compañeros, los protege, el siempre delante. Esto va en contra de la realidad, pues se sabe que Audie sufrió Síndrome de Estrés Postraumático, pero esto hubiera sido mostrar debilidad en la santificación urbi et orbi del Icono.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Tenemos una película de la que se han olvidado de inyectar emoción, mueren algunos soldados y lo que me transmiten es la nada, ejemplo notorio de esto es como nos cuelan una relación flash con una joven italiana, María (Susan Kohner), que conforme lo ve lo invita a cenar con su madre y hermanitos, y acto seguido lo está besando, pues porque sí (mención surrealista es que todos en esta familia hablen inglés, puaj!). Por cierto, para diferenciarlo de los demás compañeros, estos mientras tanto están con prostitutas que los roban (moralina low cost).
Spoiler:
Ver que sus sonados actos de heroísmo son dramatizados de modo burdo, pues lo vemos que tras ser heridos o matados compañeros suyos, Audie preso de la ira arremete contra los soldados germanos, resulta impostado, y en otro tipo de film puede tener un pase, pero aquí que se trata de una biografía queda caricaturesco, verlo con una ametralladoras en plan Robocop acaba con decenas de soldados sin que estos sean oposición alguna, de pie frente a ellos, sin parapetarse tras nada (puaj!), o en lo alto de un tanque disparando contra los teutones que parecen patos de feria cayendo uno tras otro, mientras oímos que agazapados unos cobardes (nadie va a yudarlo!) soldados USA comentan que debería Ausdie salir de allí, pues el tanque está ardiendo y con el depósito de combustible roto, y en cualquier momento explotará, pero justo cuando Audie ha hecho su particular genocidio nazi , salta del acorazado y este explota, venga!
Originalmente, se consideró a varios generales que sirvieron en la Segunda Guerra Mundial para realizar la apertura de voz en off de la película, entre ellos Maxwell D. Taylor y Omar Bradley, hasta que finalmente se eligió al general Walter Bedell Smith.
Audie Murphy ingresó al ejército en 1942 a los 18 años. En 1943, Murphy se convirtió en un reemplazo en la Compañía B, 15º Regimiento de Infantería, Tercera División, 7º Ejército, en el norte de África, y sirvió con la unidad durante la guerra en Túnez, Italia, Francia, Alemania y Austria. Durante ese tiempo ascendió de PFC a comandante de compañía, fue herido tres veces, mató personalmente a 240 alemanes y fue uno de los dos únicos soldados que quedaron en la compañía original al final de la guerra. Sus condecoraciones suman 24, desde la Medalla de Honor del Congreso hacia abajo.
Película exitosa comercialmente, la más taquillera de Universal hasta veinte años después con “Tiburón” (1975) de Spielberg.
Este héroe americano merece una película, pero no este pastiche panfletario que parece hecho únicamente para ensalzar el reclutamiento militar de jóvenes. Gloria Ucrania!!!
Spoiler:
Ver que sus sonados actos de heroísmo son dramatizados de modo burdo, pues lo vemos que tras ser heridos o matados compañeros suyos, Audie preso de la ira arremete contra los soldados germanos, resulta impostado, y en otro tipo de film puede tener un pase, pero aquí que se trata de una biografía queda caricaturesco, verlo con una ametralladoras en plan Robocop acaba con decenas de soldados sin que estos sean oposición alguna, de pie frente a ellos, sin parapetarse tras nada (puaj!), o en lo alto de un tanque disparando contra los teutones que parecen patos de feria cayendo uno tras otro, mientras oímos que agazapados unos cobardes (nadie va a yudarlo!) soldados USA comentan que debería Ausdie salir de allí, pues el tanque está ardiendo y con el depósito de combustible roto, y en cualquier momento explotará, pero justo cuando Audie ha hecho su particular genocidio nazi , salta del acorazado y este explota, venga!
Originalmente, se consideró a varios generales que sirvieron en la Segunda Guerra Mundial para realizar la apertura de voz en off de la película, entre ellos Maxwell D. Taylor y Omar Bradley, hasta que finalmente se eligió al general Walter Bedell Smith.
Audie Murphy ingresó al ejército en 1942 a los 18 años. En 1943, Murphy se convirtió en un reemplazo en la Compañía B, 15º Regimiento de Infantería, Tercera División, 7º Ejército, en el norte de África, y sirvió con la unidad durante la guerra en Túnez, Italia, Francia, Alemania y Austria. Durante ese tiempo ascendió de PFC a comandante de compañía, fue herido tres veces, mató personalmente a 240 alemanes y fue uno de los dos únicos soldados que quedaron en la compañía original al final de la guerra. Sus condecoraciones suman 24, desde la Medalla de Honor del Congreso hacia abajo.
Película exitosa comercialmente, la más taquillera de Universal hasta veinte años después con “Tiburón” (1975) de Spielberg.
Este héroe americano merece una película, pero no este pastiche panfletario que parece hecho únicamente para ensalzar el reclutamiento militar de jóvenes. Gloria Ucrania!!!