Terminando de ver “The Titan” (2018) de Lennart Ruff con Sam Worthington, Nathalie Emmanuel, Taylor Schilling, Tom Wilkinson, Diego Boneta, Agyness Deyn, Corey Johnson, Noah Jupe, entre otros. Película de Ciencia Ficción sobre un proyecto de La OTAN llamado “Titán” que involucra la colonización humana a esa Luna de Saturno, puesto que La Tierra está al borde de una nueva Guerra Mundial debido a la escasez de alimentos y recursos; por lo que hay un grupo de personas dispuestas a todo… La idea de convertir a Titán, La Luna más grande de Saturno y la 2ª en tamaño del Sistema Solar, en el nuevo hogar de la raza humana no es algo nuevo; de hecho es un planteamiento científico probable, que superó la idea de colonización marciana y venusiana, lo que sucede es que en este filme se decanta por el “Mad Doctor” muy al estilo “Frankenstein” usando a las personas con habilidades como conejillos de indias, y por medio del engaño, ser sometidos a tratamientos varios que los ayudaran a respirar bajo el agua durante horas, suportar altísimas temperaturas, y otras “mejoras” que podrían tener algunos efectos colaterales. Vamos, algo así como lo que hizo el Dr. Josef Mengele en La Segunda Guerra Mundial o bien, como lo que hacen algunas farmacéuticas y gobiernos con el resto de la humanidad, aunque eso suene a Teorías de La Conspiración, el fondo de la trama resulta fascinante: ¿Cómo será el ser humano del futuro? ¿Acaso regresaremos al agua, qué aspectos tendríamos, etc.?; pero el filme se va por la ficción más ABSURDA como la combinación de ADN de otros animales como los murciélagos… ¿Quién dijo que hay murciégalos en Titán? U otras ideas disparatadas que vale la pena mencionar… Técnicamente nada del otro mundo, sin grandes efectos de maquillaje, pues no es más un disfraz, el filme tiene mucho suspenso, donde resalta la labor de Lennart Ruff, ganador de La Medalla de Oro, premio Oscar Estudiantil en 2014 al Mejor Cortometraje llamado “NOCEBO” en la categoría de filme extranjero para Alemania; y que aquí debuta en el largometraje; inyectando sentimientos a una historia familiar, donde el hombre es quien se arriesga a todo, siendo la esposa la verdadera protagonista de la historia. Filmado en Gran Canaria, España; El Ejército Español participó en la producción con soldados y vehículos, siendo la primera participación del Ejército Español en una película internacional. Sin embargo, entre los grandes hoyos argumentales, hubo algunos muy visibles, pues estamos en 2048, y todos usan Range Rover 2018; al tiempo que no se nota por ningún lado eso de que el planeta está en peligro; lo que sí se sabe es que “El tiempo se acaba… nuestros hijos serán testigos del final de los días”
NO RECOMENDADA
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas
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