Ay...Keanu. Siempre te dieron papeles relevantes en cintas de gran prestigio mundial, como son esas ya clásicas Pactar con el Diablo, Drácula de Bram Stoker o la trilogía Matrix (a la cual por cierto, esta saga parece querer hace homenaje en muchos de sus momentos). Y siempre te las arreglaste para aunar tanto críticos como fans, con ese rostro y personalidad únicos. Ya cuando hiciste de Neo en la ya mencionada trilogía sobre un mundo virtual, nos creímos totalmente que, mas allá de Keanu Reeves, el actor consagrado , eras realmente el elegido. Pero es que señores, lo que Keanu hace en estas cintas es ya historia de nuestro cine. Porque si me permiten decirlo, ya no es que Keanu sea idóneo para hacer este papel, sino que directamente yo diría que ha nacido , para este papel. Tras 3 películas, ya eramos incapaces de ver a John Wick con otro rostro que no fuese el suyo. Y ahora , estrenándose esta magnifica, cuarta parte , este sentimiento no hace mas que reafirmarse. Porque una vez mas, vemos a un John desatado, violento, sarcástico y que ve el mundo de solo una forma en que un asesino podría verlo. Y además , lo haces acompañado de rostros como Lance Reddick, Ian Mcshane, Donnie Yen, Scott Adkins...todo un lujo. Todo esto redondea un plantel actoral sobresaliente.

Pero ay, no nos perdamos. Estamos hablando de cine de acción puro y duro, de la vieja escuela como dirían algunos, enfocado en ofrecernos altas dosis de violencia, peleas coreografiadas, patadas imposibles, piruetas sin fin, vehículos en constante movimiento....todo un festival de adrenalina solo apto para los más exigentes con este género. Y no, nunca decepciona. Es imposible que lo haga. Entre otras cosas, porque dudo que exista nada parecido a lo que para mi ha supuesto esta cuarta entrega.

Para empezar, de las casi 3 horas que dura el film, yo diría que por lo menos 2 horas son puramente de escenas de acción; y sorprendentemente, logra mantener el tirón y que no te aburras en ningun momento...salvo hasta quizás el tramo final, en que se repiten algo las muertes (ver zona spoiler),pero claro, tampoco estamos ante una película perfecta. No alcanza para mi el estatus de obra maestra, aunque esto lo digo con matices: si hablamos de lo que ha supuesto para mi el visionado de la tetralogía como conjunto, como nuevo aporte al cine de acción esencial y a sus raíces, con el despliegue visual que nos ofrecen las nuevas tecnologías, ahí si que si señores, solo puedo aplaudir y rendirme ante la evidencia, de que estamos ante una nueva obra maestra.

Porque si algo hace rematadamente bien esta tercera secuela, es redondear el contexto, historia, trasfondo de personajes...de todas las demás películas. Al menos para mi, he sentido las 4 como un todo, un conjunto interconectado a través de ciertos diálogos y referencias, y de un mundo que empezó a construirse con una modesta primera película y que ha ido alcanzando cotas mas altas, hasta llegar a lo que nos ofrece esta cuarta película: la maximización , o lo que es igual, el esplendor al mas alto nivel, de lo que la franquicia nos puede ofrecer. Una vez eres consciente de esa conexión, la película te gusta todavía más.

Pero es que visualmente es una delicia, empezando por lo que supone el grueso de la cinta, que son las peleas y escenas de acción. Es John como siempre le hemos visto, pero más, mejor, mas variado, con aún mas tipos de armas, más villanos, mas escenarios....La cúspide hasta ahora (y no creo que pueda superarse) de todo lo que puede exprimirse visualmente la saga. Un diez redondo aqui.

Las interpretaciones, como ya dejé entreveer arriba, son de alto nivel y están impecables, sobretodo los protagonistas. Keanu es John y John es Keanu, nada que añadir. Ian Mcshane redondea un personaje a la altura de su leyenda como actor, por el que será sin duda recordado. A Lance Reddick se le hace un emotivo homenaje, y Donnie Yen e Hiroyuki Sanada realizan unos papeles tan memorables que querrías verlos mas tiempo en pantalla. No me ocurre lo mismo con los villanos: Bill Skarsgard impone físicamente, pero no termino de verle en un papel como este (un rostro más veterano quizás, aunque el actor la verdad que lo hace bastante bien); Scott Adkins está brutalmente caracterizado, pero a la vez tanto maquillaje impide que pueda destacar tanto....el que si impone y llega a caerte fatal es el guardaespaldas del malo, que va a dar guerra y mucha a nuestros protas. Ah, y no me olvido del omnipresente Laurence Fishburne, que repite su rol como el carismático Bowery King, y de la nueva incorporación de Shamier Anderson como Tracker, con su perro, que es una máquina de matar.

Le pongo buena nota a la película tanto como 4 entrega de una saga ya inmortal para mi, como película de acción independiente, ya que muestra un nivel tan alto que será difícil, muy difícil que cualquier otra producción logre igualarlo en pantalla. Aunque, como dije, algún detalle (zona spoilers) para mi, le impida estar en la cúspide: