Dado que Hitchcock es uno de mis directores favoritos y que casi todo lo que he leído sobre esta película no hacía si no ponerla por las nubes, no solo como una de las mejores de Hitchcock, también como una de las mejores películas de la historia, una obra de culto, empecé a ver La ventana indiscreta con las espectativas muy muy altas y relamiéndome por el buen rato que iba a pasar viendo un peliculón.

El chasco fue monumental. Una película que se suponía que debería crear una atmósfera de suspense, que debería atrapar al espectador, que debería intrigarme, que me tendría que dejar pasmado y sin pestañear para no perderme nada, resultó ser una enorme decepción. Tanto es así que, por primera vez tratándose de este director, deje de verla porque me distraía con cualquier cosa y cogía el móvil cada dos por tres.

Cuando la conseguí ver entera, de principio a fin y con mucha fuerza de voluntad, pude (por desgracia) ver confirmada mi primera impresión.

El guión está lleno de trampas. No me importa que este u otro director se saque de la manga alguna que otra trampilla para que en su película cuadren ciertas cosas siempre y cuando sean asumibles, pero lo que aquí tenemos es algo totalmente inverosímil y descarado. Y es que no se puede pasar por alto algo tan esencial y tan ridículo como el hecho de que todo el puto mundo (incluido el malo, por supuesto) viva con las ventanas abiertas de par en par para que nuestro protagonista pueda ver todo lo que le de la gana. Joder, eres especialista en currarte historias y en enrevesar tramas, seguro que podías haberte esforzado un poco más en esta ocasión. De hecho, en La soga (película de Hitchcock realizada 6 años antes que la presente) uno de los alicientes de los macabros protagonistas era cometer su asesinato a plena luz del día, pero hasta ellos corrieron las putas cortinas, y eso que estaban en el último piso donde casi nadie podía verlos.

El desenlace es bochornoso, no se le puede describir de otra manera. En el único momento que consigue crear emoción y suspense, cuando el malo camina hacia el piso del protagonista, manda todo a tomar por el culo al dejar la puerta abierta. Todo se soluciona en medio minuto porque sí, y lo lógico sería cabrearte porque piensas que llevan dos horas tomándote el pelo, pero desde que ves la puta escena de los flashes ya pasas de todo.

Le pongo un 5 porque Stewart me cae bien y porque muy muy en el fondo tiene una buena idea (aunque no se haya sabido ejecutar).