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Voto de Kyrios:
7
Drama. Intriga Phroso es un popular mago que realiza trucos con su esposa. Un día descubre que su mujer se ha dado a la fuga con otro hombre contra quien perderá la función de sus piernas después de una pelea. Los meses pasan y la esposa de Phroso regresa con una niña para morir poco después. El mago jura venganza contra el hombre que le arrebató a su mujer pero no será hasta dieciocho años después, cuando Phroso establecido al oeste de Zanzíbar ... [+]
20 de diciembre de 2013
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
La Venganza es siempre uno de los motores principales en las películas de Tod Browning. Este motivo, lo encontramos siempre en sus mejores películas, como en Freaks (1932), donde el personaje de Cleopatra era ajusticiado por sus aires de superioridad ante los personajes a los que ella consideraba inferiores, o en Muñecos infernales (1936) así como en Más allá de Zanzíbar (1928) una película que vuelve a contar con el tándem Lon Chaney y Tod Browning y que está considerada una de las mejores obras del director.

En más allá de Zanzíbar nos volvemos a encontrar con otra de esas historias rocambolescas, que sólo a un director con la personalidad de Browning le podían interesar en aquellos tiempos. Ya la sinopsis del argumento nos puede parecer, cuanto menos, extraña: Una mujer comparte el amor con dos hombres (Lon Chaney y Lionel Barrymore), hasta que finalmente se decanta por uno, el personaje que interpreta Barrymore, pero Lon Chaney no acepta el resultado y se inmiscuye en una trifulca que lo acabará dejando sin poder utilizar las piernas nunca más. Evidentemente, durante el resto de su vida, buscará vengarse de Barrymore.

Otra vez pues, nos encontramos con que el personaje principal de la película se trata de un Freak, de un personaje que mutilado en un accidente, que se aparta de la sociedad (tanto voluntariamente como involuntariamente, en este último sentido Browning nos coloca el diálogo de las señoras mayores para que el espectador pueda entender que el personaje de Chaney ya no tiene su sitio en la sociedad). Esto no quiere decir que el director de la película se posicione a su favor. Chaney no es ni mucho menos un bendito, más bien al contrario. Los Freaks para Browning son iguales que los seres normales, el espectador a fin de cuentas, en el sentido que al igual que aquellos, también cometen errores, tienen sentimientos y desean las mismas cosas. Eso sí, las reglas del juego para ellos son diferentes.

¿Dónde trabajan los tres personajes en un inicio de la película? Sí, efectivamente, en espectáculos circenses, y es que el mundo personal de Browning vuelve hacer acto de aparición. Una feria que aparece en los primeros momentos de la película, y que dejará paso a los territorios más exóticos del África donde el espectador del momento debió quedar absolutamente cautivado con el aspecto visual de la película. Es allí donde habita el personaje interpretado por Chaney, consumido absolutamente por la venganza (su interpretación es absolutamente excepcional, y pocas veces en el cine se han visto personajes tan carcomidos por dentro como lo parece el personaje de Chaney) y que se ha hecho el dueño de una tribu africana. Al director le sirven estas ambientaciones tan insólitas para el espectador medio, para mostrarnos una gran cantidad de detalles que revelan una historia totalmente sórdida, no ya sólo la gran cantidad de insectos y animales singulares o en la magnífica representación de la ambientación africana, sino también rituales en los que la tribu africana pondrá fin a la vida humana en diversas ocasiones. Precisamente la vida humana y su fragilidad es una constante en el motor de la película, y resultará patente en el acto final que realizará Chaney.

José Manuel Serrano Cueto, ha visto en la película una clara influencia de la tragedia griega en el desarrollo de la película. Así pues, podríamos encontrar diversos elementos que formaban parte indispensable de la tragedia y que aparecen en la película, como la Hybris (el descontrol y las ansías de sobreponerse de un personaje, en este caso Lon Chaney, que acabará siendo castigado por los dioses) cuando Lon Chaney decide vengarse de Barrymore intentando asesinar sin querer a su propia hija, o la catarsis (momento final en que el público se purifica mediante la expiación normalmente trágica del personaje principal), en este caso, el acto final de sacrificio, en el que por cierto, Browning nos deja un detalle de gran nivel, mostrándonos el colgante de Chaney entre las llamas, dándonos la cruda imagen de que ha sido devorado por las llamas.

Y es que si por algo ha sido importante Browning en el cine, no es por la ruptura de las formas (en la película la cámara apenas realiza movimientos y los encuadres siempre acostumbran a ser estables), sino por la importancia iconográfica de sus películas. Por otra parte, pocos directores hubieran recurrido a una serie de detalles tan sórdidos, como el ya comentado momento del sacrificio, o incluso el patetismo con el que Chaney tiene que descender de su habitación cada vez que le llaman.

http://neokunst.wordpress.com/2013/12/20/mundo-mudo-mas-alla-de-zanzibar-1928/
Kyrios
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